“A nadie se le eliminará la cuenta o perderá la funcionalidad de WhatsApp el 15 de mayo a causa de esta actualización”, indicó la aplicación de mensajería (propiedad de Facebook) en una entrada en su centro digital de ayuda para usuarios.
Asimismo, al contrario de lo que había sostenido antes, WhatsApp anunció que no enviará recordatorios “persistentes” a los usuarios que rechacen o ignoren los nuevos términos.
Hasta ahora, WhatsApp había explicado que los usuarios que no aceptaran las nuevas condiciones irían recibiendo recordatorios “persistentes” y progresivamente perderían algunas funcionalidades de la aplicación, como la capacidad de acceder a las listas de chats para conversar.
Además, WhatsApp tenía la intención de impedir que los usuarios recibieran llamadas y notificaciones si al paso de varias semanas seguían sin actualizar su cuenta, lo que de facto significaría tenerla bloqueada.
Ahora, sin embargo, WhatsApp dijo “no tener planes de que esos recordatorios sean persistentes o de limitar la funcionalidad de la aplicación”.
La actualización de WhatsApp, adquirida por Facebook en 2014, ha generado una gran cantidad de dudas y desinformación, especialmente sobre si los cambios permitirían a Facebook acceder a datos personales, de contactos o sobre las conversaciones que se mantienen en la aplicación.
Precisamente por la controversia y confusión generadas, WhatsApp ya retrasó a principios de año la fecha límite de actualización, que pasó de febrero a mayo.
Facebook y su popular filial de mensajería han intentado desmentir varias veces que con las nuevas normas vayan a acceder a contenido de mensajes o llamadas, así como a listas de contactos o grupos y a la geolocalización compartida.