“Me preocupa lo que [el móvil] pueda darme. Prefiero esperar y observarlo”, afirmó al medio. “Soy feliz con mi iPhone 8, que, para mí, es lo mismo que el iPhone 7, que a la vez es lo mismo que el iPhone 6”.
Según Wosniak, los smartphones han llegado a un límite creativo, y ningún teléfono nuevo ha ofrecido un avance significativo en inovación.
“Por alguna razón, el iPhone X será el primera que, desde el primer día, no compre. Pero mi esposa seguro lo hará, así que tendré de cerca uno para verlo”, agregó.
De acuerdo a CNBC, Wozniak ha expresado su escepticismo sobre algunas novedades del iPhone X, como el sistema de reconocimiento facial —que ha causado dudas— y sustituye al Touch ID.
Apple fue fundada en 1976 por Steve Wozniak y Steve Jobs. A Wozniak se le atribuyó ser la mente ingeniera detrás del éxito inicial de la compañía, entonces dedicada principalmente al desarrollo de computadoras.
Wozniak dejó Apple en 1985, en desacuerdo con la dirección empresarial de ese entonces. El entusiasta de la tecnología, sin embargo, ha mantenido cierto contacto con una compañía que bajo la dirección de Jobs, desarrolló otros productos como el iPhone.
En los últimos años, Wozniak se ha dedicado más al desarrollo de carros eléctricos y sin conductores, lejos de los smartphones.