Comience con una tarea de lectura
Muchas personas no leen las instrucciones de los electrodomésticos hasta que han cometido un error y se ven, entonces, obligadas a buscar el manual del propietario. Cuando adquieres un auto, que podría ser el aparato más costoso que comprarás jamás, no esperes a cometer un error: lee todas las instrucciones desde el primer día.
Para vehículos viejos, posiblemente sea un libro encuadernado en papel. En el caso de carros más nuevos, lo más probable es que lo consigas en formato digital. Si un manual no viene con su auto, es casi seguro que podrá obtenerlo en línea, sin importar la edad del vehículo.
El manual del propietario le indicará cuándo se deben llevar a servicio los distintos sistemas. También le mostrará cómo encontrar cosas como la varilla del nivel de aceite, así como los depósitos del refrigerante y del líquido de la dirección hidráulica. Algunos manuales contienen instrucciones para trabajos de mantenimiento que puede realizar usted mismo.
Los neumáticos están entre usted y el camino
Las neumáticos son esenciales. Compruebe la presión del aire cada semana con un manómetro confiable. Simplemente desenrosque la tapa de la válvula de la llanta, coloque el manómetro sobre la válvula y presiona hacia abajo. Hágalo antes de conducir porque la presión subirá con la temperatura del neumático.
Infle las llantas según las especificaciones establecidas por el fabricante del auto. Las encontrará en el manual del propietario y, en muchos casos, en la parte interior de las puertas del vehículo. Verifique la llanta de repuesto también. Algún día podría necesitarlo.
Verifique el aceite; cambie el aceite
Para los propietarios de vehículos con motor de combustión interna, los lubricantes mantienen las cosas en marcha. Todos los autos usan algo de aceite durante la conducción regular, un carro usado puede requerir un litro o un poco más entre cambios de aceite. Si permites que el nivel de lubricante baje más de lo recomendado, podría dañar el motor y anular cualquier garantía.
Para verificar el aceite, sencillamente saque la varilla. Seguramente tiene una manilla colorida para ayudar a encontrarla. Límpiela, colóquela de nuevo y retírela otra vez. El nivel correcto será indicado en la varilla. No coloque lubricante hasta que tenga al menos un litro menos. Usa el tipo de aceite indicado por el fabricante del vehículo. Esta recomendación estará reflejada en un número de viscosidad, como 5W-30.
Los lubricantes contaminan con el tiempo, así que deben cambiarse regularmente. Para autos que se conducen en recorridos largos, un intervalo de 10 mil kilómetros es suficiente. Si cada vez que usa su vehículo, conduces 2 o 3 kilómetros, un intervalo de 6 mil kilómetros es mejor, ya que la contaminación por humedad es un problema cuando los motores alcanzan la temperatura de funcionamiento con poca frecuencia.
Los autos más nuevos tienen un sistema que monitorea la condición del aceite y avisa cuándo es tiempo de realizar el servicio. Asegúrate de que el mecánico reinicie el sistema de monitoreo cuando se cambie el aceite.
También verifique los niveles de otros fluidos como los que se usan en el sistema refrigerante, los frenos, la dirección hidráulica y la transmisión.
Ojos sobre la carretera
Si su parabrisas se raya cuando enciendes los limpiaparabrisas, es momento de remplazarlos. Encontrará las instrucciones en su manual de propietario. Asegúrase de usar las láminas correctas para su vehículo. Si prefiere no intentarlo, en la mayoría de las estaciones de servicio pueden hacerlo mientras espera.
Deja que sus luces brillen
Antes de comprar un auto usado, asegúrate de que las luces funcionan: los faros de luz alta y baja, las traseras, las direccionales y las de frenado. Después de eso, verifíquelas una vez al mes. Algunas bombillas se cambian fácilmente. Otras, como los complejos sistemas de ledes y los faros, pueden requerir, quizás, más trabajo de desmontaje del que le gustaría. Pero no conduzcas sin una dotación completa de luces. Eso podría provocar un accidente o que le multen.
No se deje atrapar ‘muerto’
Un juego de cables puede ayudarle a encender su auto si la batería se agota y el motor no arranca. Pero si la avería es causada por un problema en el sistema de carga o un defecto de la batería, los cables no servirán.
Si va a encender su auto usando la batería de otro vehículo, asegúrase de que la caja de cambios de ambos carros estén en la posición de aparcado, y apague el otro vehículo. Sujete un extremo del cable rojo a la terminal positiva de su batería. Conecte el otro extremo del cable rojo a la terminal positiva del auto donador.
Conecte un extremo del cable negro a la terminal negativa del otro vehículo antes de conectar el otro a una parte metálica (sin pintura) en su carro (conectarlo directamente a la batería no es recomendado porque podría generar chispas que podrían causar que la batería explote). Encienda el otro auto y espere cinco minutos a que su batería se recargue antes de encender su vehículo.
Por supuesto, no siempre encontrarás un alma caritativa que le ayude a encender su auto. Ese problema se puede resolver si compra un arrancador de emergencia.
Aunque los híbridos de gasolina y eléctricos tienen un circuito de alto voltaje para alimentar al motor eléctrico, también tienen un circuito de 12 voltios que maneja otras funciones. En muchos casos, encender el motor de combustión es una de ellas. Una batería híbrida de 12 voltios puede arrancarse, pero sé cuidadoso al hacer las conexiones correctas. Revise su manual.
Manténgalo limpio
Lavar su auto lo mantendrá en buen estado y lo protegerá. Insectos, savia de árbol y otras sustancias nefastas pueden dañar la pintura y acelerar la corrosión.
Así que es aconsejable lavarlo regularmente. Hágalo usted mismo con una cubeta, una esponja y una manguera podría resultar atractivo para sus instintos de autosuficiencia, pero no es la manera más ecológica de hacerlo. Si lava su automóvil en la entrada de su cochera desperdiciará más agua y hará más daño al ambiente que llevándolo a un autolavado de buena reputación que recicle el agua y elimie responsablemente los desechos.
Las ventas de vehículos de segunda mano están en auge, pero es posible que muchos nuevos propietarios no sepan lo que les espera en términos de mantenimiento.