Google escribió que su auto trataba de evadir sacos de arena en una intersección cerca de su sede empresarial en Mountain View, California, cuando la parte delantera izquierda chocó con el costado derecho del bus. El coche de Google trataba de virar a la izquierda para evadir los sacos de arena que estaban a su derecha, y poder doblar a la derecha. Iba a 2 millas por hora (3,2 kilómetros por hora) y el bus a 15 mph (24 kph) .
El conductor-escolta del carro —que según leyes estatales tiene que estar en el asiento delantero del vehículo y tiene que tomar el control en caso necesario— pensó que el autobús iba a ceder cuando ocurrió el choque, según el reporte.
Aunque Google no le echó la culpa a nadie, emitió un comunicado aseverando que “claramente algo de la responsabilidad recae en nosotros porque si nuestro vehículo no se hubiera movido, no hubiera ocurrido el choque”.
El comunicado calificó el incidente “un ejemplo típico de la complejidad de conducir, todos estamos tratando de adivinar el movimiento del otro vehículo”.
La Agencia de Transporte de Santa Clara Valley declaró que ninguno de los 15 pasajeros del autobús fue lastimado, ni su conductor tampoco. El autobús sufrió daños leves.
“Está en desarrollo una investigación interna, hay varios elementos que no se han esclarecido, así que aún no hemos señalado responsabilidades” , expresó la portavoz Stacey Hendler Ross en un comunicado.
Es posible que nunca se emita una declaración de culpabilidad inequívoca, especialmente si los daños fueron insignificantes y si ninguna de las partes presenta demanda. Aun así, es probable que el suceso del 14 de febrero haya sido la primera vez que un carro autónomo Google haya causado un accidente.
Los carros Google han estado involucrados en casi una docena de colisiones en Mountain View y sus alrededores desde que comenzaron a ser sometidos a prueba en las calles de la ciudad a comienzos del 2015. En la mayoría de los casos, fueron los carros Google los que fueron chocados por otros. Nadie ha quedado lastimado de consideración.
Una portavoz de la agencia de transporte de California dijo que la agencia conversará con Google para averiguar mejor qué ocurrió. Bajo las leyes estatales, Google tiene que preservar los datos recabados antes de cualquier accidente.
“No creo que vaya a haber versiones encontradas porque los datos están allí”, dijo Robert W. Peterson, experto en temas de aseguradoras en la Universidad de Santa Clara, que ha evaluado los vehículos autónomos.