Y, cuando este se sale de lo normal, cuando el miedo es irreal se generan las fobias, que son un tipo de trastorno de ansiedad a causa de un temor fuerte e irracional, explican los expertos. Ante estas situaciones, las fobias impiden que realicemos actividades de la vida diaria al percibir un sentimiento paralizante”.
La aracnofobia, el miedo a las arañas, es una de las fobias más extendidas, y las personas que la padecen son muy reacias a exponerse a arañas reales.
Por ello, neurocientíficos de la Universidad de Basilea, Suiza, han desarrollado una aplicación de realidad aumentada (RA) que aplica la terapia de exposición: si se apunta con la cámara del teléfono móvil a la mano, se verá una araña posada sobre ella. Pero solo en la pantalla, y no en la realidad.
Los investigadores han constatado que los afectados tienen menos miedo a las arañas virtuales, y señalan que la aplicación ya ha demostrado su eficacia en un estudio clínico: tras unas pocas sesiones de entrenamiento en casa, las personas que participaron en la prueba sintieron menos aversión hacia las arañas reales.
Los usuarios pueden comprobar si tienen miedo a una araña virtual descargando la versión gratuita de Phobys, disponible para Android e iOS en inglés. El entrenamiento para reducir la aracnofobia se puede adquirir posteriormente como compra dentro de la aplicación.
Según los científicos, los mayores de 16 años con formas leves de aracnofobia pueden utilizar la aplicación por su cuenta, mientras que a aquellos que tengan una aracnofobia severa se les recomienda hacerlo con acompañamiento médico.
El entrenamiento consta de nueve niveles diferentes en los que el usuario se va acercando poco a poco a la araña virtual y acaba interactuando con ella. Con cada nivel, se supone que las tareas son más intensas y difíciles.
Cada nivel termina también con una evaluación del miedo y repulsión que se siente. A partir de estas sensaciones, la aplicación decide si es necesario repetir un nivel. Para mantener a los fóbicos motivados, el programa ofrece resultados parciales, así como animaciones y efectos de sonido gratificantes.
Más experiencias
En 2014, el equipo de la Universidad de Newcastle informó que ocho de cada nueve niños tratados en un proyecto llamado The Blue Room (la habitación azul) lograron superar temores por este medio.
Esta es una realidad virtual inmersiva creada para niños con autismo. Aquí no se utiliza lentes, lo que hay es una habitación en la en la que se recrean escenarios personalizados que representan el mundo real.
En Inglaterra, en el 2017 se presentó el proyecto The Wayback, que busca crear una serie de películas basadas en la vida real que ayude a las personas con alzhéimer por medio de la realidad virtual. La primera de ellas fue la historia de la coronación de la reina Isabel II de Inglaterra, en 1953, en la que actuaron docenas de personas vestidas y que simularon lo más real posible ese momento.
El objetivo es recrear momentos populares y positivos del pasado, hacer retroceder a los espectadores por medio de imágenes y sonidos utilizando la realidad virtual y así traer recuerdos felices y conversaciones con las personas.