En el sector del frigorífico ha destacado el sistema “openAssist” de la serie iQ700 de Siemens. El electrodoméstico se conecta en red con el asistente de voz de Amazon, Alexa (Echo Dot), o bien con el propio asistente de cocina de la compañía, el Smart Kitchen Dock, que está previsto que salga a la venta en 2023. Así conectado, el aparato abre la puerta con un comando de voz cuando se tiene las manos ocupadas.
A través de Smart Speaker u opcionalmente de las aplicaciones de la empresa, se pueden manejar también los nuevos hornos de la serie iQ700 de Siemens y los hornos de la serie 8 de Bosch. El asistente reacciona a un comando de voz y selecciona el programa de cocción o repostería adecuado de acuerdo con los alimentos que se tengan en el horno. Con la cámara incorporada en la cavidad del horno también se puede vigilar el proceso de cocción. El horno Siemens también está equipado con un sistema de apertura de la puerta por comando de voz.
Con ayuda de la nueva función “CookAssist”, integrada en la app de la firma, las placas de inducción de las cocinas del fabricante alemán Miele también hablan con Alexa. En este caso, el asistente de voz indica los siguientes pasos de preparación o avisa cuando la grasa de la sartén está lo suficientemente caliente para el filete.
Para ello, primero hay que seleccionar la receta en la app de Miele y enviarla a la pantalla del display de Amazon Echo Show con la indicación “Alexa, abre CookAssist”. A partir de ese momento, el cocinero es guiado sin tener que desplazarse por la pantalla con los dedos grasientos.
La sincronización se consigue mediante sensores en las placas de cocción. Un algoritmo evalúa los datos que estos envían y se asegura, por ejemplo, de que la temperatura de los utensilios de cocina sea la correcta. La promesa de Miele: “Quemar la comida es cosa del pasado”. La función estará disponible previsiblemente a partir de 2023.
La inteligencia artificial ocupó un lugar clave en la IFA. En el futuro, esta permitirá a los electrodomésticos comprender mejor a sus usuarios e interactuar con ellos. Pero no solo eso: la tecnología aprende por sí misma y mejora su trabajo.
Esta capacidad se basa en un aprendizaje a partir de un gran conjunto de datos que los dispositivos escanean constantemente, por ejemplo, al compartir muchos usuarios sus datos entre sí o al alimentar repetidamente sus respectivos dispositivos con sus preferencias. De este modo, los aparatos son capaces de adaptar sus acciones a la situación actual. Cuanto más tiempo se utilicen los electrodomésticos y se les dé la oportunidad de analizar el comportamiento de uso de sus propietarios, más inteligentes serán.
En este sentido, Miele, Bosch y Siemens presentaron además una cámara de alta resolución para el horno. Los aparatos analizan sus propias imágenes y comprueban el progreso de la preparación en el horno. En Miele, el sistema inteligente “Smart Food ID” analiza los alimentos que se introducen en el horno y sugiere un programa adecuado. Una vez alcanzado el estado de cocción deseado según la cámara del horno, el horno se apaga.
Inicialmente, el “Smart Food ID” solo reconoce unos 25 platos. Sin embargo, también aprenderá a identificarlos a través de las fotos que los usuarios suban de los platos de sus propios libros de cocina.
Quienes así lo deseen, podrán compartir además sus habilidades culinarias enviando imágenes del horno a otras personas vía correo electrónico, WhatsApp, Instagram o Teams. También es posible editar las fotos y, por ejemplo, etiquetarlas para una invitación.
También Bosch afirma que la IA de los nuevos hornos de la serie 8 es capaz de aprender comparando continuamente datos con miles de procesos de cocción compartidos en todo el mundo. Con ayuda de estos datos, el sistema calcula el tiempo de cocción de la comida que se encuentra en el horno con una actualización cada 30 segundos.
Por cierto: la inteligencia artificial también puede garantizar un uso más eficiente en algunos aparatos, es decir, puede ahorrar energía y costes de electricidad. Muchas lavadoras, por ejemplo, son capaces desde hace tiempo de reconocer la cantidad de ropa cargada y ajustar automáticamente los patrones de lavado. Estas funciones se amplían constantemente.
Samsung, por ejemplo, presentó en IFA las nuevas lavadoras Bespoke. Una función denominada AI-Wash reconoce los tipos de tejidos, el peso de las prendas y el grado de suciedad, y puede ajustar los tiempos de remojo, enjuague y centrifugado en consecuencia.
También las aplicaciones para electrodomésticos de algunos fabricantes se están ampliando para incluir nuevas funciones de ahorro de energía. Samsung, por ejemplo, ofrece la opción de controlar el consumo de energía de las lavadoras y secadoras Bespoke. Ahora ha añadido una función que suministra consejos para ahorrar energía. En la aplicación de Miele, un análisis de los valores medios de los ciclos de uso mostrará en el futuro alternativo para ahorrar energía.