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Según el estudio de la consultora norteamericana Errata Security basado en 28 mil contraseñas de los clientes de un sitio web estadounidense, reveló que la mayoría de usuarios utiliza su nombre o el de familiares (16%), secuencias como 1234 (14%), títulos de series o películas (5%), la palabra password (4%) y otras como Whatever (lo que sea), Iloveyou (te quiero) o Yes (sí).
Pero ¿cómo podemos asegurarnos de que nuestra contraseña es segura? La mayoría de las webs cuentan con sistemas automáticos que indican el nivel de seguridad de la contraseña que intenta registrar y aconsejan que se utilicen letras y números combinados, así como mayúsculas, minúsculas y en algunos casos símbolos.
Algunas malas prácticas que se pueden evitar:
- Utilizar una misma contraseña para las cuentas de correo electrónico, para los perfiles de Twitter y Facebook, ente otros.
- Dejar contraseñas escritas en un papel bajo el teclado, en un pósit pegado en el monitor, o en algún lugar que este a la vista de varias personas.
- Utilizar contraseñas fáciles de adivinar: 1234, la palabra “password”, los dígitos de la fecha de nacimiento, el nombre de un ser querido, el nombre de alguna mascota, el de nuestro personaje favorito, etcétera.
- Emplear únicamente claves con letras minúsculas o numéricas.
- Usar contraseñas cortas de 6 a 8 caracteres.
- No cambiar la contraseña en muchos años.
Una contraseña segura deberá cumplir mínimamente con estas condiciones:
- Utilice una contraseña diferente para cada servicio en línea.
- Cambie las contraseñas con regularidad, especialmente las más utilizadas.
- Combine letras mayúsculas con minúsculas.
- Utilice números junto con las letras.
- Si el sistema lo permite, utilice símbolos de puntuación como espacios en blanco, _, -, +, *, etcétera.
- Para crear su contraseña puede utilizar la mnemotecnia —técnica para establecer una asociación y recordar una cosa—, por ejemplo, podemos ver una computadora y pensar: “Esta es la computadora de Karla Pérez”. Esta frase, fácil de recordar, podemos usarla para generar una contraseña utilizando las iniciales de la frase, por ejemplo:
Frase: “Esta es la computadora de Karla Pérez”
Clave: “EelcdKP“
También podemos usar alguna frase más compleja, algo que tengamos en mente o incluso la letra de alguna canción:
“Soy un fanático de la serie Merlí y quiero ver la temporada completa”
“SufdlsMyqvltc”
También puede reemplazar algunas letras por números, como:
- 0 por O y o
- 1 por l e I
- 2 por Z
- 3 por E
- 4 por A
- 5 por S
Así se pueden robar su contraseña:
Keyloggers: programas que se ejecutan en segundo plano, grabando un registro con todos los caracteres introducidos por el usuario.
Contraseñas guardadas: Con acceso directo al equipo, no es necesario usar un keylogger para acceder a las contraseñas almacenadas.
Contraseña única: Si usa una misma contraseña para varias páginas, un webmaster malintencionado, al registrarse en su web, podría obtener su contraseña para iniciar sesión en otras páginas.
Contraseña previsible: Las que son con facilidad se pueden asociar con el usuario.
Listas de palabras: Se trata de listados -enormes- de palabras y contraseñas comunes que se utilizan probando una a una de forma automática.
