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Día Internacional del Vino Rosado: cómo elaborarlo y por qué se ha popularizado

Popular en todo el mundo, el vino rosado es una bebida que se caracteriza por su aroma, color y sabor, y para celebrar el Día Internacional del Vino Rosado, acá se explica cómo elaborarlo.

Vino Rosado

El 11 de junio se celebra el Día Internacional del Vino Rosado, y qué mejor forma de celebrarlo que contar sus propiedades, su forma de elaboración y por qué es tan popular. (Foto Prensa Libre: Shuttertock)

El 11 de junio se celebra el Día Mundial del Vino Rosado, cuya popularidad se ha incrementado en los últimos años, en especial por ser una bebida versátil, y que aporta un perfil tan interesante como su color y aromas.

Elaboración

Se tiende a pensar que un vino rosado es menos complejo que uno tinto. Sin embargo, la elaboración de un vino rosado resulta ser más delicada y exigente que la mayoría de los tintos y blancos.

Esto se debe a un control minucioso y preciso para mantener su color, equilibrio y frescura característicos.

El color del vino rosado se puede obtener con la combinación de uvas oscuras y claras, aunque no es una práctica permitida en muchos países.

Lo más común es que sea elaborado solo con uvas oscuras. Para ello, existen dos métodos principales en la elaboración de un vino rosado con su color distintivo, como se indica a continuación.

Maceración

El más común para elaborar un vino rosado es dejar reposar el mosto junto con el hollejo, porque ahí se concentran los pigmentos de color.

El hollejo cumple una función similar a la de una bolsita de té, la cual, en contacto con el líquido, va liberando su color y estructura.

Dependerá del enólogo cuánto tiempo deja reposar estos componentes. Como resultado, nos entrega un líquido con tonos cargados de color similares al rosado salmón.

Prensado directo

Mientras que en el proceso anterior se busca dejar reposar el mosto con el hollejo por un tiempo, en este se prensan de inmediato las uvas, sin dejar que compartan ambos elementos.

Esto produce un líquido con tonos más pálidos con un tono rosa claro.

¿Cómo se marida?

Maridar los vinos rosados es mucho más sencillo de lo que parece.

Por lo general se tiene la idea de que son dulces, y que el mejor acompañamiento sería un postre. Sin embargo, para que un rosado sea más atractivo para la gastronomía, deberá ser seco y poseer buenos niveles de acidez que estimulen nuestro apetito.

Dada su versatilidad, y su equilibrio entre la acidez y el sabor frutal, el vino rosado es un acompañamiento ideal para una amplia gama de platos, desde frescos y ligeros hasta especiados y complejos.

Aunque no todos los rosados se adaptan a cualquier tipo de gastronomía, algunos pueden armonizar con la tailandesa, así como platillos picantes mexicanos o ciertas especialidades peruana.

El rosado es un vino refrescante, perfecto para épocas de calor, por lo que maridará bien con ensaladas, ceviches, mariscos, pescados, sushi, así como pastas con salsas de tomate, arroces y vegetales.

¿Busca un vino ideal para una tabla de jamones y quesos? El rosado es la mejor opción. Muchos de los jamones, embutidos y quesos han sido elaborados con un proceso de maduración en sal o cuentan con altos niveles de grasa.

Por ello, un rosado con excelente acidez nos permitirá despejar esos sabores fuertes y preparar el paladar para el siguiente bocado.

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