El proceso no ha sido del todo sencillo y ha tenido que lidiar con lo que ella llama una explosión de caos, ordenar sus ideas, orientar mejor su presupuesto y en especial tomar las riendas de su nuevo proyecto.
En ese caminar, algunas personas deciden tener un cambio mientras a otras factores que no están bajo su control les llevan a buscar y experimentar un nuevo camino.
La pandemia ha puesto decenas de ejemplos de profesionales que se han quedado desempleados y han emprendido por rutas opuestas o contradictorias en las que han descubierto nuevos talentos, empresas novedosas y otros campos inexplorados que han resultado positivos.
Frente a ello, la doctora Stephanie Guilá, psicóloga y directora de Boston Clinical Consulting en Centroamérica y México, dice que la vida en general viene con variables que no siempre es posible manejar.
Guilá compara el vivir con una guerra, en la que que todos los retos y obstáculos tienen un propósito y el ser humano tiene que estar consciente que la vida no es como nos la plantean en las redes, porque hay momentos de luz y de sombra, y el equilibrio entre ellos es lo que nos permite salir adelante. “Un momento difícil no nos hace débiles solo muestra nuestra naturaleza humana, así que situarnos en el rol de víctima no nos ayuda y es mejor posicionarse en una visión de optimismo y encontrar cómo vamos a superarnos”, agrega Guilá.
Alejandra Celis, psicóloga industrial organizacional y catedrática de la Universidad Rafael Landívar, comparte que quienes se enfrentan al cambio deben asegurarse de no perder el control y para ello es importante definir cuál es el objetivo principal.
Incluya en esa nueva ruta tener un balance entre el trabajo, los estudios, la familia y ordenar los espacios propios para ir en la búsqueda de calidad de vida.
Por su parte, Guilá recomienda crear un plan o estrategia con plazo para ejecutar ciertas funciones y tener autodisciplina y determinación para llevar a cabo los nuevos proyectos.
Guilá explica que es natural que miles de pensamientos negativos vengan a diario y un mecanismo importante consiste en ejercitar la voluntad y tenacidad con visualizaciones y trabajo duro, así como con palabras de afirmación que permitan resistir los momentos de incertidumbre y frustración
En ocasiones las personas se dan cuenta que necesitan hacer un cambio cuando han llegado a un agotamiento laboral que se identifica cuando el rendimiento y la productividad han bajado, lo cual afecta el estado de ánimo y no se tiene la claridad de por qué estar en ese lugar, enfatiza Celis.
También es bueno salir de la zona de confort y enfocarse en las cosas buenas que podría traer un cambio como este en la vida. Celis refiere que es importante reconocer los talentos propios y conocimientos para aprovechar esas capacidades que se han explorado y aplicarlos en el nuevo rumbo.
Cuando el miedo aparece
Clara Fernández, capacitadora de Smart Business Trainning, Sbt, también comparte que en su proceso de reconstrucción de vida se ha enfrentado al miedo.
“Nacemos con miedo a las alturas y a los ruidos extremos, casi todo lo demás es una construcción social”, dice. Para ella lo más importante no es solo enfrentarlo sino llegar a entender qué nos quiere decir ese temor.
En general la experta comenta que para lograrlo podríamos seguir algunos se los siguientes pasos:
- Dibuje su miedo, dele una forma, un color, algo que lo haga visible y al verlo pregúntese qué le está diciendo y cuáles serían los pasos para vencerlo.
- Ordene sus ideas para llegar a conclusiones profundas.
- Reconozca si para vencerlo necesita prepararse en algún tema.
- Algunas personas buscan el apoyo de amigos, asesorías profesionales, apoyo psicológico, así como de un coach de vida que le ayuda a enfocarse para dar el paso a enfrentar los nuevos retos.
- A veces nos importa mucho el qué dirán los demás, pero es necesario enfocarse en las emociones propias y en reconocer qué nos va a hacer felices y eso mismo nos ayudará a mermar los pensamientos de miedo, agrega la psicóloga Alejandra Celis.