Salud

Qué pasa después de una cirugía de la mama y cómo cambia la vida

Las pacientes con cáncer de mama enfrentan un reto en su salud y existen algunos puntos a fortalecer en la búsqueda de su recuperación.

El cáncer de mama afecta a mujeres de cualquier edad, en todos los países del mundo, pero las tasas son mayores entre las mujeres adultas según la Organización Mundial de la Salud. (Foto Prensa Libre: Thirman/Pexels)

El cáncer de mama está presente en todo el mundo y ocupa el primer lugar en todos los continentes aunque se ha reducido la mortalidad, dice Agatha Reyes, médica oncóloga guatemalteca.

Aunque ser mujeres aumenta el riesgo, es una enfermedad que afecta también al uno por ciento de los hombres. Sergio Ralón, jefe de la clínica de tumores y enfermedades Mamarias del hospital General San Juan de Dios y Presidente de la Asociación Guatemalteca de Mastología, explica que el cáncer de seno si es detectado a tiempo es una enfermedad altamente tratable con una expectativa de vida altísima.

Blanca B., de 70 años, es un ejemplo de lo anterior. Reconoce que pasó por el diagnóstico desde hace dos décadas y durante estos años ha pasado diferentes etapas. Un autoexamen le ayudó a encontrar esta enfermedad a tiempo y sabe que a esto le debe el estar todavía con su familia.

"Mi vida al lado de mis hijos y nietos me llena de alegría aunque he tenido otros momentos difíciles como la pérdida de mi esposo", comparte.

La cifras ponen un número a la experiencia que pasan millones de familias al recibir la noticia de un diagnóstico positivo. La Organización Mundial de la Salud estima que en 2022, en todo el mundo se diagnosticaron 2,3 millones de casos de cáncer de mama en mujeres, y se registraron 670 mil muertes por esa enfermedad.

Uno de los tratamientos que pasan las pacientes es la transformación de su cuerpo con una mastectomía, una cirugía para extraer todo el tejido mamario de una mama.

En el portal de la Clínica Mayo se explica que se puede extraer la piel y el pezón de la mama. Algunas técnicas actuales de mastectomía pueden conservar estos últimos.

Es frecuente que después de la cirugía, las mujeres sientan dolor, entumecimiento y estarán bajo ciertos cuidados y recomendaciones en casa.

El tejido mamario y los ganglios linfáticos se envían al laboratorio para su análisis. Los resultados del laboratorio después de casi dos semanas darán pauta a otros tratamientos que se requieran.

Según el tipo de cáncer ellas se someten a radioterapia, quimioterapia y otros medicamentos para eliminar las células cancerosas y evitar la propagación.

Más cambios después de la cirugía

Al final del tratamiento viene otro proceso de vida. Parte de éste es el temor frecuente que algunas personas tengan por el regreso de la enfermedad.

Durante varios años, se requiere de un seguimiento médico. Se piden exámenes físicos y análisis de sangre, entre otras evaluaciones que ayuden a monitorear el estado de salud.

Uno de los cambios de vida es que en ocasiones aparece hinchazón de la totalidad o parte del brazo y dedos de las manos, esto es llamado linfedema. Se da porque se extirpan ganglios linfáticos, aunque Ralón indica que ahora se tienen nuevas técnicas que evitan que esto pase y solo el 5 por ciento de sus pacientes reporta esta situación.

Cuando aparece es necesario visitar al médico para bajar la hinchazón y determinar que no exista infección u otras causas.

En general para las pacientes ayudará el uso de una manga, un masaje llamado drenaje linfático, y según el caso, una cirugía. Una hinchazón grave hace que el líquido linfático drene a través de pequeñas roturas en la piel y cause ampollas, también se tiene el riesgo de infecciones.

Además, las pacientes necesitan seguir fortaleciendo su estilo de vida e implementar cambios físicos como emocionales frente a esta enfermedad.

Susana Salazar, homeópata y especialista en medicina alternativa, explica que después de este proceso se sugire una desintoxicación a través de medicina homeopática y llevar una alimentación saludable.

En este artículo se comentan otros parámetros que los especialistas comparten que son de importancia para recuperarse y tener mejores expectativas en la salud.

Lea más: Fallece Vivian Peralta: guatemalteca promotora del apoyo a las mujeres con cáncer de mama

1. Alimentación

Uno de los primeros puntos en que coinciden los entrevistados es la alimentación y sugieren comer equilibrado para nutrir al organismo. No se recomiendan los alimentos procesados.

La psicóloga especialista en oncología, Lea Echeverría, comparte que Guatemala es rica en alimentos saludables y es accesible el comer bien.

Hierbas como la espinaca y el macuy, legumbres como frijoles y garbanzos, huevos, fruta y otros vegetales son opciones sanas, agrega la profesional. Echeverría hace énfasis que en otros países estos alimentos tienen un precio más elevado y por eso es importante aprovecharlos al tenerlos en los mercados locales. De igual manera, en el país se tienen procesos de cocina tradicionales que permiten una serie de platillos saludables y que es indispensable rescatar.

2. Actividad física

Después de la cirugía es necesario consultar con el médico cuándo es posible empezar a ejercitarse. Esto debe ser paulatino, una caminata corta es positiva para comenzar, agrega Salazar.

En general, cualquier actividad física da más energía y una mejor calidad de vida. Así que el ejercicio tiene que ser parte de la recuperación, ayuda a relajarse en momentos de tensión y por eso también es una herramienta en lo emocional, agrega Echeverría.

3. Búsqueda de terapia emocional

Echeverría aclara que esto no es accesible para todos, pero es importante buscar apoyo. Existen programas gratuitos que tienen disponibles algunas instituciones.

La gran finalidad de una terapia es fortalecer el amor propio, poner metas y encontrar maneras de manejar el estrés, así como acciones para poner límites personales. En una consulta con un psicólogo es posible encontrar una zona segura para expresarse.

Cuando se acumula el estrés y no se encuentran las válvulas de escape es posible que se tenga menos defensas a nivel corporal y nos enfermemos más, explica Echeverría.

4. Redes de apoyo

La familia y los amigos son importantes y el ideal es tener a alguien de confianza cercano. No tiene que ser una gran red, pero si confiable, dice Echeverría.

"El expresarnos e interactuar nos beneficia para sentirnos mejor", comparte la psicóloga.

Esta red podría ayudar al paciente para apoyarle en diferentes circunstancias que necesita en su recuperación. Por ejemplo, se puede ofrecer apoyo para algún traslado al médico, darle acompañamiento al visitarle si está disponible, llamarle para preguntar cómo está, o bien tomar acciones para hacer una compra de alimentos, entre otras acciones que podrían ser importantes para la persona.

5. Área espiritual

El buscar este aspecto "no se trata de una religión sino de un encuentro personal con aquello que la persona crea", agrega Echeverría.

A través de meditación, oración y rezos se puede conectar con un ser supremo y despierta la fe y esperanza frente a la prueba de vida que se pasa, concluye la psicóloga.


ESCRITO POR:

Ingrid Reyes

Periodista de Prensa Libre especializada en periodismo de bienestar y cultura, con 18 años de experiencia. Premio Periodista Cultural 2023 por el Seminario de Cultura Mexicana y premio ESET región centroamericana al Periodismo en Seguridad Informática 2021.

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