Qué le pasa al cuerpo cuando tiene exceso de cortisol y adrenalina, las hormonas del estrés
Las actividades diarias, situaciones económicas y problemas en familia ocasionan estrés y tensión que sin control podrían pasar una factura alta para la salud.
El estrés es un estado de preocupación o tensión mental generado por una situación difícil. En exceso es posible que nos afecte. (Foto Prensa Libre: Andrea Piacquadio/Pexels)
En el momento en que el estrés se presenta, resulta difícil relajarnos y concentrarnos, y podemos sentirnos ansiosos o irritables. El estrés, además podría estar relacionado con dolores de cabeza o de otras partes del cuerpo, malestar gástrico, dificultades para dormir o alteraciones del apetito (comer más o menos de la cuenta). Cuando el estrés se vuelve crónico se agravan los problemas de salud y dan lugar a un aumento del consumo de tabaco, bebidas alcohólicas y otras sustancias.
Las situaciones estresantes pueden causar o exacerbar problemas de salud mental, frecuentemente ansiedad o depresión, que requieren atención médica, situaciones que la misma Organización Mundial de la Salud, OMS, ha descrito.
Expertos comentan que los problemas de salud mental derivados del estrés incluso podrían afectar nuestra vida y desempeño educativo o laboral.
La hormona del estrés
En un episodio de estrés, el hipotálamo, que es una región pequeña en la base del cerebro, activa un sistema de alarma en el cuerpo.
Por ejemplo, pasar por una calle silenciosa y por la noche, podría causar que mediante señales nerviosas y hormonales, este sistema incita a las glándulas suprarrenales, que se encuentran encima de los riñones, a liberar una oleada de hormonas, como la adrenalina y el cortisol.
La Clínica Mayo explica que la adrenalina hace que el corazón lata más rápido y que la presión arterial aumente, y dé más energía. El cortisol, por su parte, es la hormona principal del estrés, aumenta la glucosa en la sangre, o sea, los niveles de azúcar. También mejora el uso de la glucosa en el cerebro y aumenta la disponibilidad de las sustancias del organismo que reparan los tejidos.
El cortisol también reduce las funciones que se considerarían como no esenciales o perjudiciales en una situación de lucha o huida. Modifica las respuestas del sistema inmunitario e inhibe las funciones del aparato digestivo, del aparato reproductor y los procesos de crecimiento. Este sistema complejo y natural de alarma también se comunica con las regiones del cerebro que controlan el estado de ánimo, la motivación y el miedo.
En general estas hormonas ayudarán a actuar. Una vez ha pasado una amenaza percibida, las hormonas restablecen sus niveles normales, el problema es que la persona se mantenga durante horas y días en un estado de estrés permanente y tenga un impacto en el cuerpo debido al exceso de estas.
¿Es posible controlar el estrés?
Es posible lidiar con el estrés para sentirse menos abrumado y mejorar el bienestar físico y mental. El ideal es tener a diario un espacio para darle equilibrio al día y buscar bienestar, este va desde elegir qué comemos hasta ejercitarnos o tener momentos de relajación.
Entre las actividades podría ayudar un encuentro con amigos, salir al teatro, a un concierto, al cine, hacer un curso de baile, de pintura, por mencionar algunas ideas que se inclinen por el bienestar.
Aquí algunas ideas para disminuir los efectos del estrés que proponen conocedores.
Dormir lo suficiente
Es importante el descanso. La OMS explica que el sueño repara, relaja y revitaliza nuestro organismo y nos ayuda a hacer frente a los efectos del estrés.
La higiene del sueño implica acostarse cada noche a la misma hora y levantarse cada mañana también a la misma hora, incluso los fines de semana.
Si es posible, el lugar donde se duerme debe ser tranquilo, oscuro y relajante, y se debe mantener a una temperatura agradable. Se sugiere además limitar el uso de aparatos electrónicos como el televisor, las computadoras y los teléfonos inteligentes antes de dormir.
Manténgase en contacto con los demás
Hablar con sus familiares y amigos y tener una red de apoyo es importante en momentos de crisis. Si la crisis sobrepasa a la persona podría requerirse además el llevar una terapia que oriente a la persona, agrega Lea Echeverría, psicóloga.
Lleve una dieta saludable y haga ejercicio
La nutricionista Helen Arango agrega que lo ideal es consumir una dieta equilibrada, frutas, vegetales y mantenerse hidratado. Es posible que en momentos de estrés se caiga en elegir aquello que no es tan saludable, por ello se de cuidar de tener a la mano opciones más sanas.
El ejercicio, por lo menos tres veces por semana, es algo positivo. Incluso las pautas activas en el trabajo o hacer caminatas diarias son de beneficio.
La relajación muscular progresiva, la meditación, el yoga, las técnicas de respiración o de atención podrían hacer una diferencia. En su libro Los primeros 20 minutos, Gretchen Reynolds, comenta que el ejercicio también es un escudo emocional. "Todo parece indicar que el estrés positivo del ejercicio prepara las células, estructuras y vías cerebrales para soportar otros tipos de estrés", dice Michael Hopkins, investigador del Laboratorio de neurobiología del aprendizaje y la memoria, en la Universidad de Darmouth.
Entre aspectos positivos del ejercicio también estudios de la Universidad de Illinois han encontrado que solo 20 minutos de caminata antes de un examen puede aumentar las calificaciones de los estudiantes, por ejemplo.