Las complicaciones respiratorias en personas expuestas a un siniestro de ese tipo son con frecuencia graves y silenciosas, junto con las infecciones, constituyen actualmente una de las principales causas de muerte en personas que han sufrido quemaduras.
El humo es una mezcla visible de gases, vapores, y partículas sólidas de carbono -hollín- producidas durante la combustión de materiales.
William González, vocero de los Bomberos Voluntarios, señala que el monóxido de carbono es una sustancia que está presente en el humo que se genera durante un incendio y puede generar daños al inhalarlo debido a que se desplaza por la hemoglobina e impide la oxigenación de la sangre.
González agrega que esa sustancia también puede ocasionar muerte por intoxicación si la persona inhala grandes cantidades de humo.
El neumólogo Luis René Cruz Gordillo afirma que no se trata solo de la toxicidad sino el calor, ya que el humo puede provocar quemaduras en el sistema respiratorio.
“El humo también está constituido por partículas sólidas, las cuales al ser mayores de 2.5 micras se quedan en la nariz o la garganta y causan molestias, aunque, si son de menor tamaño pueden llegar a los pulmones y causar daños respiratorios como obstrucción de los bronquios”, señala Castillo.
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El médico agrega que el tratamiento debe ser rápido y oportuno. “Oxigenar al paciente es importante, así como hidratarlo. También se pueden usar medicamentos como dilatadores de bronquios y antiinflamatorios; además, según el caso se deberá usar antibiótico para prevenir una infección cuando hay quemaduras”, dice.
El neumólogo señala que algunas personas no desarrollan síntomas en el momento, sino luego de 24 o 48 horas. Tos y fatiga son señales que deben tomarse en cuenta y acudir a una revisión médica, según el experto.
¿Cómo actuar durante el siniestro?
Voceros del cuerpo de Bomberos Municipales señalan que el humo afecta a cualquier persona debido a la cantidad de toxinas que tienen los gases, ya sea un incendio estructural o forestal, porque todo material combustible desprende gases tóxicos o residuos materiales.
Los socorristas aconsejan cubrir la nariz y la boca con un pedazo de tela húmedo para filtrar el aire que se respira.
Los expertos también aseguran que luego de estar expuesto al humo de un incendio es necesario asistir a un médico para revisión, aunque no haya síntomas.
Si se encuentra en medio del siniestro, indican que es necesario acercarse al suelo lo más que sea posible y salir arrastrándose o gateando, ya que el humo se concentra en la parte de arriba de las habitaciones debido a su alta densidad.