Su estructura, que toma la forma de pequeños troncos o ramitas, sale de la corteza de los árboles que pertenecen a la especie Bursera graveolens. Los pedazos de madera tienen capas rugosas (es similar al palo de ocote) y se distinguen por ser livianos.
No obstante, la característica más significativa de este producto natural radica en su aroma, descrito por muchos como uno dulce.
Lili Gutiérrez, terapeuta que se ha dedicado a desarrollar procesos con aromas, y quien ha utilizado el Palo santo en espacios tanto de socialización como individuales, explica que el olor que surge de esta madera puede entenderse entre lo “sutil y agradable”, y es idóneo para procurar momentos de meditación.
Ante la particularidad de esta especie, cabe preguntarse qué la define realmente y cómo se hace posible un olor tan único, incluso al no ser precisamente un incienso, sino una resina.
Armando Cáceres, químico biólogo, catedrático universitario y encargado de investigaciones en el laboratorio Farmaya, explica que, los árboles de las Burceraseas son aromáticos, y que, al Palo santo lo integran 98 moléculas que fomentan su olor.
Cáceres explica que el aroma del Palo santo se logra a partir de una concentración de limoneno, una sustancia que puede encontrarse en frutos cítricos y cuyo aroma se aproxima a lo leñoso.
El olor se acentúa luego de una expulsión de la resina cuando la madera envejece y se solidifica con el aire, explica el químico biólogo Miguel F. Torres en su publicación Historia del incienso, elaborada junto a la Asociación cultural Nueva Acrópolis.
Cabe mencionar que el Palo Santo alcanza entre los dos y los seis metros. Además, su corteza varía entre el marrón y el gris.
Beneficios y activación del Palo Santo
Para que el Palo santo emane su efecto aromático es necesario encenderlo con una pequeña llama. De esta forma hacen combustión sus elementos químicos.
Lili Gutiérrez explica que los principales beneficios de la madera a través de su olor radican en la modulación de energías y el aumento de las vibraciones corporales.
“No es algo que provoque afección. Produce armonía, equilibrio e induce a la paz interior”, comparte la terapeuta, quien además subraya que el aroma fomenta los “recorridos internos”.
Por otro lado, el aroma también llega a modificar la vibración y las sensaciones dentro de los espacios físicos.
“Sirve para limpieza de los recintos, ya que en los lugares habitan experiencias. El Palo santo ayuda a limpiar lo que ha quedado, que muchas veces tiene forma de cargas o emociones”, explica Gutiérrez.
Aunque se trata de un producto fácil de portar y activar en los espacios cotidianos, estas son algunas de las formas para usarlo, recomendadas por la terapeuta:
- Es aconsejable que se queme por unos cuantos segundos sobre cualquiera de sus extremos.
- Una vez la madera empieza a tornarse negra y sale humo, se debe soplar para que se active el humo y se produzca el aroma.
- Se puede dejar en un recipiente dentro de las habitaciones, o bien en espacios más abiertos.
Según apunta Armando Cáceres, desde la farmacología se ha estudiado el Palo santo como un aceite esencial. Cáceres cuenta: “Se ha encontrado que tiene una actividad antimicrobiana que puede funcionar contra hongos y ácaros, aunque se trata de una evidencia preclínica”.
Otras de sus derivas beneficiosas se encuentran en las capacidades de ataque sobre células malignas y sarcomas, así como en sus efectos antiinflamatorios, señala el químico biólogo.
Armando explica que, en lugares de Guatemala, las hojas y los tallos de la Bursera graveolens suelen utilizarse para aliviar el dolor de estómago, mientras que en lugares como Perú se usa a manera de analgésico e incluso como expectorante.
En las creencias espirituales
Aunque los ejemplares de la Bursera graveolens suelen estar distribuidos a lo largo del continente americano, tienen sus orígenes en los territorios del sur. Miguel F. Torres explica que el Palo santo tiene una amplía distribución en espacios cálidos de Bolivia, Colombia, Paraguay, Venezuela, Guyana Francesa, Surinam y Brasil.
El investigador Torres comenta que este tipo de madera se ha utilizado “para encender fuegos sagrados en vasijas, para ceremonias y rituales, protegiendo así el espacio en el que se va a realizar la actividad”.
A la vez, este elemento ha sido utilizado por sacerdotes incas para rituales religiosos-espirituales en los que se busca atraer la buena suerte, alejar la negatividad y conseguir una mejor comunicación espiritual.
Torres agrega que muchas personas, a través de una práctica espiritual, han utilizado el Palo santo en rezos para atraer la suerte, mejorar estados de ánimo, así como para limpiar espacios y ambientes de malas energías.
Estos beneficios, además de los aportes aromáticos-terapéuticos, del Palo santo pueden obtenerse en Guatemala a través de unos cuantos lugares que venden el producto. Entre ellos destacan las iniciativas y tiendas (en cada nombre, al dar clic, podrá conocer más sobre el proyecto):