Según las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud, reveladas ayer, la ingesta diaria de azúcares no debe sobrepasar las 12 cucharaditas, o sea, 50 gramos o el 10 por ciento de la ración energética al día.
Sin embargo, la OMS aconseja a niños y adultos reducir a 25 gramos de azúcar diarios, lo que tendría ventajas adicionales para la salud, como un menor riesgo de tener sobrepeso, obesidad y caries.
“Si uno toma un bol de cereal por la mañana, una lata de bebida azucarada y un yogur azucarado, ya superó el límite”, declaró Francesco Branca, director del Departamento de Nutrición para la Salud y el Desarrollo en la OMS.
Según análisis científicos de estas directrices, los niños que consumen bebidas azucaradas tienen mayores niveles de sobrepeso y de obesidad que quienes no lo hacen.
Además, hay más incidencia de caries dentales cuando el consumo de azúcar es mayor a 10 por ciento de las calorías diarias, en el caso de ellos.
Azúcar oculto
Un estudio señala que en Estados Unidos, el 80 por ciento de los alimentos que se venden en los supermercados contienen azúcares ocultos, como los que se añaden a productos alimenticios, así como los que contienen miel, jugos y concentrados de fruta.
La meta es limitar la ingesta de bebidas azucaradas, cereales, cerveza, galletas y caramelos, dice Tom Sanders, profesor de Nutriología en el King’s College de Londres.
El Instituto de Nutrición de Centroamérica y Panamá aconseja reducir el consumo de aguas gaseosas, bebidas energizantes y embotelladas con sabores artificiales y jugos envasados, por su exceso de azúcar, así como por su contenido de preservantes y colorantes, que son dañinos para la salud.
Un estudio efectuado por la organización británica Acción contra el azúcar asevera que cada refresco energetizante puede llegar a contener hasta 20 cucharaditas de azúcar por lata, o 325 calorías, el triple de lo que se recomienda consumir al día.
Las consecuencias pueden llegar a ser graves si no se cambian estos hábitos. Según un estudio de la OMS publicado en enero, algunas enfermedades como diabetes, cáncer o cardíacas causan cada año 16 millones de muertes prematuras en el mundo.
Algunas de estas son resultado de una mal estilo de vida que incluye abuso de alcohol, tabaco o una mala alimentación, rica en grasas o en azúcar.
Algunas de estas son resultado de una mal estilo de vida que incluye abuso de alcohol, tabaco o una mala alimentación, rica en grasas o en azúcar.
El objetivo, además, es disminuir la incidencia de dolencias cardiovasculares, hepatitis o accidentes cerebrovasculares.
Recomendaciones
Entre los consejos para consumir menos azúcares están: retirar de la mesa el azúcar —morena o refinada—, el jarabe de maple o la miel; disminuir la cantidad de azúcar que se utiliza al comer cereal, panqueques, café o té, y añadir al cereal o avena, en lugar de azúcar, frutas como bananos, fresas, uvas pasas, arándanos o melocotones.
También se aconseja preferir el yogur sin azúcar y comerlo con fruta, y reducir a un tercio o a la mitad el azúcar que se le añade a la preparación de repostería. En su lugar, agregarle a las recetas extractos de almendra, vainilla, naranja o limón o especies como gengibre o canela. Asimismo, elegir bebidas sin azúcar o bajas en calorías.
