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Esta lluvia de estrellas no necesita para su observación ningún tipo de equipo especial, se puede apreciar a simple vista, siempre y cuando el cielo este despejado. La Luna se encontrará en fase de cuarto creciente, lo que facilitará la observación de los meteoros.
Es recomendable observar el fenómeno astronómico desde un lugar con poca contaminación lumínica (postes de luz, edificios, árboles o montañas), y no utilizar instrumentos ópticos que limiten el campo de visión.
Cada año la Tierra atraviesa un anillo poblado con fragmentos desprendidos del cometa Thatcher, y cuando uno de los fragmentos o meteoroides entra en contacto con la atmósfera terrestre, se calcina por la fricción con el aire, creando así el resplandor luminoso que se conoce como meteoro o estrella fugaz.
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Según el Instituto nacional de sismología, vulcanología, meteorología e hidrología de Guatemala en “ciertas épocas del año, las estrellas fugaces parecen aumentar en número y salir de una región específica del cielo llamada radiante, y se asocia a una constelación de la cual se le da el nombre, y a esto se le llama lluvia de estrellas”.
Las líridas reciben su nombre porque tienen su radiante en la constelación de Lyra, cerca de la estrella Vega.
Los registros más antiguos de la observación de las líridas se conservan en el libro chino de crónicas Zuo Zhuan y datan del año 687 a.C.
Próximas lluvias de estrellas 2018
- Eta aquáridas 5 y 6 de mayo
- Delta aquáridas 29 y 30 de julio
- Perseidas 11 y 12 de agosto
- Oriónidas 21 y 22 de octubre
- Táuridas 4 y 5 de noviembre
- Leónidas 16 y 17 de noviembre
- Gemínidas 12 y 13 de diciembre
- Úrsidas 22 y 23 de diciembre
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