Salud y Familia

La prioridad de la salud femenina

Priorizar la salud femenina es crucial para la igualdad y beneficia tanto a las familias como al ámbito laboral.

Las mujeres, aunque más longevas, tienen mayor morbilidad y usan más servicios médicos que los hombres.

(Foto Prensa Libre: Shutterstock)

Las mujeres, aunque más longevas, tienen mayor morbilidad y usan más servicios médicos que los hombres. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)

Hacer de la salud femenina una prioridad es un tema de igualdad, ya que puede traer consigo efectos positivos en todos los ámbitos de la sociedad y generar un impacto directo tanto en el núcleo familiar como laboral.     

La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que las mujeres somos más longevas que los hombres; sin embargo, la morbilidad es más elevada pese a que utilizamos con más frecuencia los servicios de atención médica.  

Por ejemplo, una de las enfermedades que aqueja a muchas mujeres y tiene un alto impacto en las actividades diarias es la migraña. Según la OMS, este padecimiento es dos veces más frecuente en la población femenina versus la masculina debido a factores de tipo hormonal. 

El mayor pico de migrañas sucede entre la segunda y cuarta década de las personas, coincidiendo con las edades de mayor productividad e impactando el desempeño laboral, familiar y social. Se estima que las mujeres perdemos hasta seis días por reposo debido a las migrañas y es que muchas veces, ese dolor pulsátil característico de la enfermedad viene acompañado de náuseas y vómito, entre otros. 

Si la migraña tiene un alto impacto en la vida de las mujeres que la sufren, el cáncer de mama se ubica, según Globocan de la OMS, como el primer tipo de cáncer que más afecta a la población femenina, seguido del de pulmón y colorrectal. 

¿Qué características se asocian con un mayor riesgo de cáncer de mama? Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la obesidad, el consumo de alcohol, ciertos antecedentes familiares, así como de tipo reproductivo y hormonales, y el consumo de tabaco, entre otros. Sin embargo, alrededor de la mitad de los casos suceden en mujeres sin factores de riesgo identificados, además de tener 40 años o más. 

Existe una inequidad muy marcada de este tipo de cáncer según el Índice de Desarrollo Humano (IDH). Por ejemplo, en los países con un IDH alto, una de cada 12 mujeres será diagnosticada con cáncer de mama en su vida y una de cada 71 morirá por esta enfermedad. En el caso de los países con un IDH bajo, solo una de cada 27 mujeres recibirá un diagnóstico de cáncer de mama y una de cada 48 morirá debido a esta causa. 

¿Cómo combatir esas cifras? 

Las cifras demostradas por el IDH, que se traducen en vidas de mujeres, sin duda, refuerzan la importancia de velar por la salud femenina. Además de los consejos cotidianos de llevar una alimentación saludable y hacer ejercicio, el factor preventivo es algo que debe tomarse con mucha seriedad. Este implica desde visitar al médico para chequeos regulares hasta practicarse exámenes de control según la edad, como la mamografía, y la colocación de las vacunas necesarias. 

"Tener acceso a una buena atención sanitaria repercute en una mejor calidad de vida para nosotras y nuestro entorno".

*Médico cirujano