El detector ha sido creado por un equipo con expertos del Instituto Tecnológico Federal de Zúrich, del Hospital Universitario de esa misma ciudad y del Laboratorio Federal de Prueba de Materiales, encabezado por el profesor de origen chino Jing Wang, señaló un comunicado oficial de la tercera de estas instituciones.
El equipo de Wang ya estudiaba con anterioridad sistemas de detección de bacterias y virus en el aire, y según los investigadores sobre esa base se pueden desarrollar sensores para virus específicos, como el causante de la pandemia de covid-19.
El sensor “no tiene por qué sustituir los test de laboratorio, pero puede usarse como método alternativo para diagnósticos clínicos, y sobre todo para medir la concentración del virus en el aire en tiempo real, por ejemplo en zonas con mucha gente tales como estaciones de tren u hospitales”. subrayaron.
Para detectar el coronavirus, los laboratorios de todo el mundo están usando principalmente un método molecular conocido cono RT-PCR (siglas de “transcripción inversa de la reacción en cadena de las polimerasas”), capaz de identificar incluso una mínima presencia del SARS-CoV-2, pero el equipo de Wang ha ideado un método alternativo.
Los test RT-PCR pueden tardar bastante tiempo y dar diagnósticos erróneos, ante lo que los investigadores suizos han desarrollado un biosensor que combina sistemas ópticos y de medición de temperatura para determinar la presencia del coronavirus.
Básicamente, el sistema utiliza fenómenos físicos por los que las moléculas de ARN de un virus producen cambios de luz y temperatura en estructuras metálicas microscópicas para determinar la presencia del coronavirus.
El equipo ha probado el sensor tanto con el actual coronavirus como con el anterior de SARS que causó una epidemia en 2003, “mostrando que puede claramente distinguir entre secuencias de virus muy similares”, y ofreciendo resultados en cuestión de minutos, explicó Wang.
El equipo investigador advirtió que el sensor todavía no está listo para detectar la concentración del coronavirus en el aire, ya que aún faltan varios pasos experimentales por dar.
Sin embargo, “una vez listo, podría aplicarse también a otros virus y ayudar a detectar y detener epidemias en su primera fase”, concluyeron.