En algunas culturas se utilizaba la danza para dar fuerza a los guerreros, en otros para el cortejo amoroso y así ha tenido diferentes significados.
A nivel histórico en Guatemala se encuentra por ejemplo la danza Rabinal Achí, un drama que forma parte de la tradición oral de los habitantes de Rabinal, Baja Verapaz, y que data del período precolonial, así como algunas danzas garífunas en la zona del Norte del país.
Más allá de solo ponernos en movimiento, el baile nos ayuda a coordinar los dos hemisferios de nuestro cerebro al conectar con nuestras emociones y poderlas expresar por el movimiento. Además, el baile mejora la agilidad y el equilibrio. Existen distintas formas en que la música despierta el cuerpo y la finalidad es que en esta combinación se desarrolle el lado creativo, comenta Elizabeth Lara, bailarina profesional de la Academia Latidos, que cada cierto tiempo organizan un tipo de “flash mob”, es decir que se reúnen personas en un punto específico de la ciudad en la que muestran algunos pasos de baile durante un tiempo determinado, como lo muestra parte del video que capta parte de este movimiento que se hizo en la Plazuela España, en el 2018. En esa ocasión las participantes fueron mujeres.
Elizabeth Lara, bailarina
Moverse también libera endorfinas que mejoran el estado anímico y la oxigenación celular, estimula la circulación sanguínea y fortalece los músculos. En general los ejercicios influye en mejorar la concentración y la memoria.
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Cómo vencer el miedo a bailar
Algunas personas tienen la creencia de no tener la habilidad de moverse, “pero estos miedos a bailar desaparecen cuando nos atrevemos a hacerlo y automáticamente se cambia por afirmaciones positivas”, dice la instructora que ha visto cómo por el baile y las artes rompen estas y otras limitaciones.
Insiste en que movernos es natural desde que nacemos hasta que morimos. Bailar es una actividad que aumenta la autoestima y también permite mejorar las interacciones sociales porque se crea una comunicación con una pareja o con otras personas como cuando salimos a las calles a bailar, expresa Lara.
El cuerpo puede contar historias y todos podemos utilizar este recurso, dice Edgardo Mercado, destacado bailarín y coreógrafo, quien era profesor de matemáticas y comenzó sus estudios en baile después de los 30 años. Él muestra en este video cómo se pueden transmitir ideas como el infinito y el tiempo de maneras poco tradicionales.
Más de danza contemporánea
Giglia Canessa, licenciada en danza, kinesióloga y educadora lúdica cuenta que ella baila desde niña y que decidió dedicarse a la investigación del movimiento. “Moverse incluso ayuda a solucionar problemas y a conocernos”, agrega.
El baile puede marcar cambios de ciclos. Han existido danzas que celebran estos momentos y es posible llevarlo a la vida personal. Canessa expresa que en ocasiones las personas piensan que por estar tristes no van a fiestas y que necesitan esperar tiempo para darse permiso de sentir gozo, pero si se planteara de otra forma, funcionaría mejor: “Busco el gozo para estar feliz y sentirme mejor, así encontrarme con gente de forma sana”.
“Bailar es una expresión natural, es gozo y es una forma de sentir y hablar sin palabras porque es otro tipo de lenguaje del cuerpo”, agrega la educadora lúdica, quien actualmente está organizando un movimiento llamado Hasta la raíz que busca que las personas tengan un espacio donde se sientan en libertad con el movimiento, el viernes 21 estará junto a al músico Basico3 en el edificio OEG, de 4 Grados Norte, donde se tendrá una sesión de movimiento orgánico para aprender a gozar. No es una clase de baile típica sino es ir a vivir un tiempo en el que se despierte la sonoridad en el cuerpo y se reconozca que se puede liberar una propia danza a través de lo sensorial.
La música también es necesaria. Para este evento se tendrá música intervenida con medios electrónico, dice Basico3, quien además expresa que esta dinámica busca que las personas se centren en su interior y se comuniquen con ellos mismos.
Canessa explica que esto es parte de la danza contemporánea en la que se experimentan conexiones con los sentidos y se genera una energía grupal. La única recomendación para este taller es llevar ropa y zapatos cómodos. El costo de la actividad es de Q100.
¿Dónde bailar?
Si quiere animarse a experimentar con el baile estas opciones podrían ayudarle a comenzar.
Latidos
2ª. Av 10-64 Z. 9 Local 109, atrás de Paiz Montufar
teléfono 2332-3159
Salsa, kizomba, tango, un curso dedicado a mujeres llamado Latidos Ladies, entre otros.
In motion
8a. calle 28-00, Zona 11 interior Parque Comercial Las Majadas, Local 37
teléfono 4226-3000
Dedicados a todas las edades. Clases de hip hop, salsa y ballet.
Salsa Latin Guatemala
Centro Comercial Paseo Liberación, Boulevard Liberación 6-55, frente al Reloj de Flores, zona 9
Locales S9 y S10
Teléfono 4217-2567
Para quienes quieren experimentar en salsa, bachata, Cha cha cha y otros.
Adiction dance Studio
Galerías Primma Locales 203 y 204
Teléfono 5466-3773
Si quiere aprender salsa, bachata, zumba, jazz o bellydance.
Escuela cubana de baile
Boulevar Vista hermosa 2a. calle 14-85 Z.15
Teléfono 2369-5571
El enfoque es en salsa, pero también se experimentan otros géneros.
Ritmo y sabor
4 Avenida, 16-24 zona 14
Teléfono 4800-2015
Salsa, bachata y kizomba están en la programación.
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