Salud y Familia

Cuide sus ojos a toda edad

La vista es uno de los sentidos que nos hace explorar nuestro entorno y nos da información valiosa. Pero, los ojos requieren de cuidado y algunos seguimientos para asegurar salud.

La Organización Mundial de la Salud explica que la combinación de una población creciente y cada vez más envejecida aumentará significativamente el número total de personas con enfermedades oculares y deficiencia visual.  (Foto: Shutterstock)

La Organización Mundial de la Salud explica que la combinación de una población creciente y cada vez más envejecida aumentará significativamente el número total de personas con enfermedades oculares y deficiencia visual. (Foto: Shutterstock)

La Organización Mundial de la Salud estima que por lo menos 2 mil 200 millones de personas en el mundo tienen deficiencia visual o ceguera y de estos casos, más de mil millones podrían haberse evitado o aún no han sido tratados.

Entre las condiciones más frecuentes están los defectos refractivos como la miopía -dificultad de ver de lejos-, la hipermetropía -ver mejor de lejos-, y otras que disminuyen la visión como la retinopatía diabética, el glaucoma y las cataratas.  También se describen enfermedades infecciosas como la conjuntivitis, según el primer Informe mundial sobre la visión publicado por la OMS en el 2019.

Se destaca que el envejecimiento de la población, los cambios en los estilos de vida y el acceso limitado a la atención oftalmológica, son algunos de los principales factores que impulsan el aumento del número de personas con deficiencia visual.

Franz Schieber López, oftalmólogo y especialista en retina, comenta que lastimosamente en Guatemala no se cuenta con una cultura de prevención sino de curación. En ese punto influyen desde cuestiones como tener una dieta balanceada y el hacer ejercicio. El experto también recomienda el protegerse y cubrirse del sol.

Por su parte, Federico Hermes, oftalmólogo agrega la importancia de limitar los tiempos en el uso de las pantallas y procurar parpadear o reponer con lágrimas naturales.

De igual manera evitar la automedicación es vital.  Los medicamentos únicamente deberían ser recomendados por un médico y en Guatemala esto no se respeta, insisten los entrevistados.

Entre las emergencias podrían considerarse los dolores severos en el ojo, que la visión se pierda o cualquier golpe directo en el ojo, aunque uno vea hay que tratarlo porque podría representar un problema a futuro.

Evitar el tabaquismo es parte de la prevención.  Schieber explica que esto tiene una repercusión en la visión y está asociada a una enfermedad llamada degeneración macular asociada a la edad y para desarrollarla entre los mayores factores de riesgo están ser de tez blanca y el tabaquismo.

En general se recomienda una evaluación anual con el oftalmólogo para asegurar la buena salud visual. Durante la pandemia la recomendación es hacerlo únicamente en casos de emergencia o que se requiera de una atención especial debido a que el contacto con los fluidos de los ojos se ha asociado con una posible fuente de transmisión del covid-19.

En los niños
Desde recién nacidos es posible explorar la visión. Un bebé que sea prematuro y bajo peso al nacer o que haya utilizado oxígeno al nacer al mes de nacido debería hacer una consulta con un oftalmólogo pediatra.

Schieber insiste en que los padres deben estar atentos a la visión de sus hijos y acercarse si ven algo anormal.  “Por lo regular las madres ven más este tipo de detalles”, agrega.

También se sugiere hacer previo al colegio una evaluación oftalmológica y en especial si se está viendo muy de cerca la televisión o pantallas.  Más adelante otro síntoma que algo no está bien es cuando realiza esta misma acción al colorear o escribir.

Algunos niños se les dificulta aprender y en ocasiones es porque no ven bien las letras.  Es necesario poner atención cuando les cuesta aprender los colores porque incluso podría ser que los niños sean daltónicos – incapacidad para ver algunos colores en la forma normal-.

Los niños requieren de un chequeo anual de su visión. (Foto Prensa Libre: Shutterstock).

Las enfermedades más comunes

Estas son algunas de las que causan mayor problemática a nivel visual.  La mayoría de ellas al detectarlas a tiempo tienen un mejor pronóstico.

La conjuntivitis

Se describe como una inflamación o una infección en la membrana transparente llamada conjuntiva que recubre el párpado y la parte blanca del globo ocular y es quizá de las consultas más frecuentes con el oftalmólogo.

Cuando los pequeños vasos sanguíneos de la conjuntiva se inflaman, se hacen más visibles. Esto es lo que hace que la parte blanca del ojo se torne rojiza o de color rosa. Aunque algunos tipos de conjuntivitis desaparecen por sí solos y no son contagiosos, otros necesitan de tratamientos completos y estrategias para evitar complicaciones.

Se ha establecido, según investigaciones que entre el uno y tres por ciento de los pacientes con covid-19 tenían este síntoma, así que de aparecer y en especial asociado a tos seca, fiebre, pérdida del olfato, entre otros, es necesario descartar que sea por esta causa.

Por su parte Schieber explica que el clima y fenómenos naturales han aumentado los casos y molestias.  También están propensos a este síntoma de ojos irritados las personas que utilizan lentes de contacto o que mantienen ojo seco o bien quienes son alérgicos.

El ideal es que cuando aparecen las molestias se consulte con un médico especialista para determinar la causa.

Entre los síntomas, además del enrojecimiento está el aumento de la cantidad de lágrimas, sensación de tener un cuerpo extraño, picazón, irritación, ardor, secreciones como pus o mucosidad, así como costras en los párpados o las pestañas, en especial durante la mañana.

Los tres tipos más comunes de conjuntivitis son virales, alérgicas y bacterianas, y pueden presentarse en forma aguda o crónica.   Al visitar al médico, la edad del paciente, la época del año y los hallazgos del examen físico son esenciales para un buen diagnóstico.

Los tipos viral o bacterianos se pueden presentar junto a síntomas de resfríos o como síntomas de una infección respiratoria, como el dolor de garganta.  Se puede propagar fácilmente, en especial con ciertas bacterias y en ciertos entornos, por estar en contacto con alguien más sin los cuidados necesarios de distanciamiento, explican los especialistas.

Regularmente los pacientes que tienen conjuntivitis la asocian con la que es contagiosa, pero no necesariamente es así. Parte del tratamiento podría ser con antibióticos esteroideos, estos van en cantidades y tiempos controlados porque su uso incorrecto podría afectar la salud visual a largo plazo desarrollando glaucoma.

En el caso de la conjuntivitis causada por el virus herpes, si llega a estar en contacto con los esteroides, el cuadro podría empeorar.

La conjuntivitis alérgica se caracteriza por la picazón.  No es contagiosa y se desarrolla regularmente por los cambios de clima, humedad, así como por contacto con polvo, humo, o exposición al sol.

Este tipo de conjuntivitis responde a los medicamentos descongestionantes antihistamínicos administrados por vía oral o tópica.

En general los ojos rojos que no responden rápida y completamente al tratamiento antibiótico tópico necesitarán una evaluación más profunda para evitar posibles complicaciones.

La conjuntivitis es una de las consultas más frecuentes en cuestión de salud visual. (Foto Prensa Libre: Shutterstock).

El glaucoma

Los síntomas bastante tardíos y solo se llega a tratar para estar controlada.  El glaucoma es la segunda causa más común de ceguera a nivel mundial. Más del 50 por ciento de los afectados en países desarrollados no están conscientes de tener esta enfermedad, cifra que puede aumentar al 90 por ciento en países en vías de desarrollo.

Aparece a partir de los 35 o 40 años, es hereditario y se caracteriza por el aumento de la presión ocular que daña y lastima el nervio óptico disminuyendo la visión.

Es un proceso crónico que no molesta y no se da cuenta que lo tiene hasta que es tarde.  El daño que provoca el glaucoma es irreversible.

En el glaucoma podría perderse la visión de forma repentina. (Foto Prensa Libre: Shutterstock).

Se debe conocer qué tipo de glaucoma se tiene.  Está el de ángulo abierto, que causa puntos de ceguera en la visión y que puede pasar de padres a hijos.

En caso sea de ángulo cerrado que se da cuando el líquido se bloquea y no puede salir del ojo, se considera una emergencia.

El glaucoma secundario está relacionado con fármacos, enfermedades o lesiones.

También está el glaucoma congénito que es hereditario y no deja que el ojo se desarrolle normalmente, y el glaucoma juvenil que puede presentarse desde los 10 años.

El tratamiento por lo regular incluye gotas para los ojos, medicamentos orales, terapias con láser o bien cirugía o la combinación de los anteriores.

Cuando se detecta a tiempo puede evitar a cuestiones como la pérdida de la vista. Existen tratamientos como medicamentos, láser o cirugía para disminuir la presión ocular.

Las cataratas

Sí dan síntomas.  La Clínica Mayo lo describe como una opacidad de la transparencia normal del cristalino del ojo.

Quienes lo padecen describen que ven como a través de una ventana empañada. La visión nublada consecuencia de las cataratas puede dificultar tareas como leer, conducir o ver otro tipo de detalles.

Las personas diagnosticadas con cataratas no ven con claridad y se les dificultan cosas como manejar vehículos, en especial de noche. (Foto Prensa Libre: Shutterstock).

Las cataratas en un gran número de casos son hereditarias, pero pueden ser provocadas por otras afecciones, cirugías anteriores o el uso de medicamentos esteroides a largo plazo.

Cuando se operan es posible salvar la visión.  Este proceso es de manera ambulatoria y se utiliza anestesia local.   Por lo general es un procedimiento bastante seguro.

Retinopatía diabética

Es una de las complicaciones de la diabetes cuando esta enfermedad se encuentra mal controlada.  El médico Daniel Canté, de la Unidad de Pie Diabético, explica que un paciente que es diagnosticado con diabetes por lo regular tiene de 34 a un 40% de daño ocular y esto representa que ha pasado entre siete y 10 años, en que la azúcar ha empezado a dañar los distintos sistemas como los ojos y específicamente la retina.

Si el paciente sigue con mal apego a tratamiento de la azúcar podría terminar con ceguera, a nivel mundial esta enfermedad es una de las causas más altas de esta complicación.

Los niveles altos de azúcar en la sangre causan daño a los vasos sanguíneos en la retina es decir aquellos que van al tejido sensible a la luz que se encuentran en el fondo del ojo. Estos vasos sanguíneos pueden hincharse y tener fugas de líquido. Además, podrían cerrarse e impedir que la sangre fluya.

En ocasiones se generan nuevos vasos sanguíneos anormales en la retina. Todos estos cambios pueden hacerle perder la visión.

Mantener los niveles de azúcar en sangre evita complicaciones también a nivel de la visión. (Foto Prensa Libre: Shuttertock).

Canté agrega que el plan educacional es esencial para que reconozca cuando buscar ayuda.  Por lo general la retinopatía se presenta con síntomas como visión borrosa, un mayor número de manchas negras, ver áreas en blanco, o bien oscuras durante el campo de visión o una visión nocturna deficiente.

Si mira manchas negras flotando representa que podría tener una hemorragia en ese momento.  Algunas resuelven por sí mismas, pero eso no significa que vuelva a suceder.  Esta es una emergencia porque podría ser una etapa avanzada de la retinopatía y al no tratarse de manera urgente es posible que pierda la visión de ese ojo.

Existen diversidad de medicamentos que podrían recomendarse y algunos de ellos se administran por medio de una inyección en el ojo.

La cirugía láser es otra opción para sellar los vasos sanguíneos que sufren pérdidas. Esto puede disminuir la hinchazón de la retina. También en algunos casos el tratamiento se inclinará por una vitrectomía.

Esto último es durante una etapa avanzada de la enfermedad y se trata de extraer el gel vítreo y la sangre de los vasos anormales en la parte de atrás del ojo. La Academia Americana de Oftalmología explica que esto permite que los rayos de luz se enfoquen correctamente en la retina nuevamente. Por este medio puede extirparse tejido cicatrizante de la retina.

En general mientras más controlado en sus niveles de azúcar esté, va a mejorar y detener el proceso y mejorará su visión. La visita anual con el oftalmólogo es indispensable para evaluar su salud ocular.

ESCRITO POR:

Ingrid Reyes

Periodista de Prensa Libre especializada en periodismo de bienestar y cultura, con 18 años de experiencia. Premio Periodista Cultural 2023 por el Seminario de Cultura Mexicana y premio ESET región centroamericana al Periodismo en Seguridad Informática 2021.