El entomólogo Jiichiro Yoshimoto, doctor en Agronomía por la Universidad de Kioto, Japón, especialista en Ecología de Insectos, investigador de la Universidad del Valle de Guatemala, y la bióloga Laura Sáenz, docente de la Universidad de San Carlos de Guatemala, especialista en hormigas, señalan que en Guatemala hay escaso conocimiento y experiencia en este tipo de crianza, pero que en otros países hay bastante información e insumos al respecto.
Pero, ¿por qué hay personas que están interesadas en tener terrarios de hormigas —Formicidae— en casa? “Las hormigas son abundantes, fáciles de capturar y viven en nidos y en grupos familiares —con muchas obreras—”, indican los profesionales.
“Además, despierta la curiosidad de saber cómo trabajan y cómo se organizan, pues las consideran muy trabajadoras”, responden Yoshimoto y Sáenz. “Por tal razón, en algunos países hay quienes las tienen en su casa para observarlas mejor. Las hormigas pueden ser un buen material para conocer y aprender la vida de los insectos sociales”, añaden.
Las colonias de hormigas están conformadas por reinas, obreras y machos. Para que la colonia permanezca por un tiempo prolongado, es necesario mantener una hormiga reina, la única hembra fértil, explican Yoshimoto y Sáenz. Las nuevas reinas y machos con alas aparecen solo en ciertas épocas del año. Salen de sus nidos y vuelan para buscar a sus parejas para aparearse. Los machos mueren después de las cópulas. Su única función es fecundar a las reinas, luego de lo cual, estas se quitan las alas y empiezan a construir sus nidos para poner huevos.
Estas crías son las obreras, que no se reproducen. Al crecer, desempeñan varios trabajos para su sobrevivencia como cuidar la descendencia, conseguir alimento, construir y mantener los nidos y defenderse de enemigos.
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El primer paso es elegir el tipo de terrario que se desea tener en casa, que puede ser abierto o cerrado, y que debe tener varias cámaras para simular el nido. Luego, adquirir y preparar el equipo específico, que suelen ser recipientes transparentes. En internet hay varios sitios que los venden o se puede construir en casa. Después, hay que seleccionar la especie que desea tener, que debe ser apropiada para la crianza en terrario.
En algunos países, hay sitios web que venden hormigas para esta crianza. En el caso de los zompopos —género Atta—, sus nidos se pueden encontrar en lugares poco abiertos, dentro o cerca de bosques, áreas verdes o huertos de cultivos.
Entre los comportamientos de esta especie está cortar y trasladar hojas, lo cual llama la atención. Además, se pueden observar las cámaras que construyen para cultivar hongos.
“Se sabe que en Estados Unidos las especies del género Pogonomyrmex —que viven en los desiertos— también se utilizan para las exhibiciones en los museos, porque son recolectoras de semillas”, señalan los expertos.
La tierra o sustrato que se coloque en el terrario, idealmente, debería ser el mismo que el del sitio del nido de donde se obtuvo la especie de hormiga, cuyos hábitats son muy variados.
En relación con la alimentación, también dependerá de la especie. La mayoría de hormigas son depredadoras, pero otras, se alimentan de néctar, carne podrida o semillas, entre otros.
En el caso de los zompopos, deben tener a su disposición suficientes hojas, pues las utilizan para cultivar hongos, que constituyen su alimentación.
Por último, destacan Yoshimoto y Sáenz, no se debe añadir hormigas de otra colonia o de otras especies al terrario, pues casi siempre se pelean, las expulsan o las matan. Además, se debe mantener la temperatura y humedad adecuadas.
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Recomendaciones
- Para obtener las hormigas, ubicar el lugar en el jardín o área verde donde se identificaron y extraerlas con cuidado con una cuchara o espátula, y colocarlas dentro de un frasco de vidrio con agujeros en la tapa, explica en un documento la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, México.
- Si no se extrae la reina para tener crianza por mucho tiempo, las hormigas probablemente mueran en tres o cuatro semanas.
- Al terrario se le conecta un bebedero con agua o un sistema de humedad, para que esta nunca les falte.
- El terrario deberá estar en cierta penumbra, especialmente, los nidos.
- Es importante evitar que se pudran los alimentos que se le colocan a la colonia.
- Las hormigas se estresan con las vibraciones, las temperaturas extremas y las variaciones de luz. Evitar que la colonia esté expuesta a estas injerencias; de lo contrario, nunca prosperará y pondrá en riesgo la vida de la reina, dice el sitio mihormiguero.es, de España.
- Estos insectos son muy limpios, por lo que llevan restos de comida y cadáveres siempre al exterior o zona de forrajeo, que hay que limpiarla regularmente.
- Las hormigas son capaces de comunicarse entre ellas, al dar señales de alarma a la colonia ante las amenazas más inminentes o al indicar el lugar donde se encuentra el alimento.
- El aparato ovopositor y reproductor de la reina está tan desarrollado, que en algunas especies le impide moverse por completo.
- Si la reina de la colonia fallece, esta desaparece al cabo de uno meses, pues las hormigas dependen de ella.
- Ninguna obrera podrá asumir el rol de reina ni podrán adoptar a otra primeriza.
- Las hormigas necesitan hibernar durante ciertos meses, por lo que disminuye la actividad de la colonia.