“Una ampolla es la acumulación de líquido acuoso en un área de la piel que se inflama. Se suelen formar en las manos y pies, porque es un mecanismo de defensa de la piel para proteger su tejido interior porque esta burbuja se forma en la epidermis”, explica Carlos Gutiérrez, podólogo.
En los pies se forman sobre todo cuando usamos zapatos nuevos que nos quedan apretados o son muy duros, también cuando caminamos por mucho tiempo y no estamos acostumbrados a usar ese calzado.
¿Por qué salen las ampollas?
Estas heridas se forman por el roce, calor o enfermedades de la piel. Son comunes en las manos y en los pies. Se conocen también como “vesícula”, para ampollas pequeñas; y “bula”, las ampollas grandes.
Sin embargo, las ampollas también son causadas por quemaduras, el frío extremo a punto de congelación, alergias, infecciones por virus que provocan la varicela y la culebrilla, así como por el virus que causa el herpes labial, dice Alejandra Solís, dermatóloga.
Así mismo, son provocadas por un eccema o dermatitis, el pie de atleta o los hongos en los pies, y por espolón calcáneo. Incluso, en algunos casos se considera síntoma del cáncer de piel o aparecen como reacción a algunos tratamientos contra esta enfermedad.
Cómo curar una ampolla
“La piel da signos previos a que aparezca la ampolla. Por ejemplo, hay calor intenso en la zona, se tiene roja esa área de la piel y arde si se roza. El enrojecimiento y ardor son las señales de que pronto saldrá la ampolla”, comenta Gutiérrez.
En general, las ampollas se curan por sí solas. Lo recomendable es evitar que haya más roce o calor sobre la zona. Estos son los pasos para curar una ampolla:
- Lavar la zona con agua tibia y jabón.
- Secar bien y aplicar
- Tapar la herida con gasa, pero evite que se pegue en el área dañada.
- En caso de que la herida duela más de lo normal y se considere que haya una infección, lo mejor es acudir a un podólogo o a un dermatólogo.
Cómo drenar una ampolla
Las ampollas de los pies causan serias molestias al caminar, por lo que algunas personas suelen drenar el líquido que hay adentro, para que ya no duela tanto. Esto se puede hacer, pero sin quitar la piel.
- Lávese las manos y limpie la ampolla con agua tibia y jabón
- Limpie la ampolla usando un hisopo
- Limpie una aguja afilada con alcohol
- Con la aguja, pinche la ampolla en varios lugares cerca de los bordes. Permita que el líquido drene, pero no quite la piel que recubre la ampolla.
- Aplique un ungüento, como vaselina y recubra con una venda de gasa antiadherente.
- Revise todos los días que no haya infección. Después de varios días, con una pinza pequeña y tijeras esterilizadas con alcohol quite la piel muerta
Cómo prevenir las ampollas
Para evitar las ampollas a causa de la fricción en los pies, se recomienda usar zapatos que le queden bien. Los calcetines que absorben la humedad también sirven. “Pruebe varios calcetines, zapatos y plantillas que estén diseñados específicamente para reducir la aparición de ampollas”, dice Clínica Mayo.
Además, puede colocar un apósito adhesivo de molesquín en el interior de los zapatos en las partes que podrían lastimarle o polvo para pies en el interior de los calcetines.
