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Halloween: ¿Por qué se le llama Noche de Brujas?
Existe una razón por la que Halloween se conoce también como Noche de Brujas, una celebración celta que se popularizó en Estados Unidos y otros países occidentales.
Halloween también se conoce como Noche de Brujas. (Foto Prensa Libre: Freepik)
Halloween va más allá de sustos, máscaras y películas de terror. Se trata de la celebración que se conmemora en la víspera del Día de Todos los Santos, cuyo origen se remonta a una antigua tradición celta conocida como Samhain.
De acuerdo con The Westport Library y otras fuentes, los celebrantes de Samhain creen que los obstáculos entre lo físico y lo espiritual se desvanecen durante esta festividad, lo que permite la conexión entre vivos y muertos, así como ciertos rituales adivinatorios.
Tiempo después, el Imperio Romano invadió las tierras donde habitaban los celtas, por lo que hubo una combinación entre las tradiciones de ambas culturas. Por ello, la celebración de Samhain derivó posteriormente en el Día de Todos los Santos o All Hallow Mas, que significa santificar, según El Almanaque del Viejo Granjero.
Esta festividad de tipo religioso-pagano se celebra usualmente del 31 de octubre al 1 de noviembre para recibir la cosecha y el inicio de la “mitad oscura del año”.
¿Por qué se llama Noche de Brujas?
Según fuentes internacionales, en la Edad Media se gestó la creencia que las brujas y los espíritus malignos rondaban durante la noche de Halloween. Por esta razón, la gente se disfrazaba de monstruos o personajes sobrenaturales para espantarlos, una costumbre que ha sobrevivido en la actualidad.
Sin embargo, a lo largo del tiempo también se adoptó el disfraz de bruja como una alternativa común durante esta festividad por tratarse de un personaje icónico en el marco de esta celebración antigua.
Las brujas en escoba
De acuerdo con El Almanaque del Viejo Granjero, las mujeres consideradas brujas practicaban la adivinación. Ellas solían acurrucarse en una chimenea como si estuviesen recostadas en una escoba y entraban en estado de trance.
Según la superstición de la época, estas mujeres salían volando de la chimenea en escobas y aterrorizaban a otros con su magia. Por esta razón, el disfraz actual de bruja incluye este elemento como uno de los principales accesorios del atuendo de este personaje.