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Es necesario aclarar que a la película no le fue tan mal. Hasta la fecha ha recaudado US$343 millones y es la quinta cinta más taquillera en Estados Unidos, pero para un estudio que está acostumbrado a llegar a los mil millones de dólares en la primera semana de estreno, seguramente es un gran decepción ver estas cifras.
1. El director
Los tibios resultados llevaron, según reporta Collider y ScreenRant, a que el estudio tomara dos decisiones: pausar la producción del resto de títulos de la línea A Star Wars Story, planificados para los siguientes años; y no volver a confiar un proyecto de esta magnitud a un director con poca experiencia.
Solo: A Star Wars Story tuvo varios incidentes con su dirección. El estudio había confiado el proyecto a los jóvenes directores Phil Lord y Christopher Miller, conocidos por 21 Jump Steet y The Lego Movie, con la intención de traer un punto de vista fresco y diferente.
Poco tiempo después se anunció el cambio de director a la mitad del rodaje, con el argumento que el dúo era “demasiado improvisado” en su gestión. La cinta fue trasladada a Ron Howard, quien tuvo que repetir varias escenas, que finalmente aumentarían el costo de la producción.
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2. La audiencia pedía otra película
Los seguidores del universo de Star Wars ya habían mostrado un atisbo de rechazo ante el proyecto. Luego de la confirmación de la precuela de Solo, los fanes manifestaron que hubieran preferido una cinta que tratara de Obi-Wan Kenobi, el maestro jedi de Anakin Skywalker.
Sus peticiones habían sido escuchadas por los estudios, varios medios reportaban la confirmación de la precuela, dirigida por Stephen Daldry; el proyecto de Boba Fett, de las manos de James Mangold; y otros planes para llevar a la pantalla grande las historias de Yoda y Lando Calrissian.
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3. Mala gestión del estreno y del dinero
¿Qué sucedió? Algunos expertos en el cine afirman que el fracaso de Solo inició con la mala elección para la fecha de estreno, que estuvo muy cerca de Deadpool 2 y Avengers: Infinity War, grandes éxitos del cine este año.
Según reporta El País, otro factor que afectó el desempeño del filme es la elevada inversión en marketing, que podrían llevar a la película a pérdidas de más de US$81 millones.
Por lo pronto, los estudios concentrarán sus esfuerzos en el estreno del Episodio IX, programado para el próximo año y la nueva trilogía de la saga, bajo la dirección de Rian Johnson.
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