Según el periódico de Singapur Straits Times, en el concierto habrá bailarinas con poca ropa disfrazadas de monjas y simulando un striptease en barras en forma de cruz.
Singapur, un país conocido por el control social ejercido por las autoridades, clasifica los conciertos y los espectáculos en función de su contenido, como hacen los países occidentales con el cine.