En el artículo, los autores hablan de un “diálogo honesto” sobre los riesgos de la pornografía. Además, la consideran “un peligro público con una seriedad sin precedentes”.
Concluyen diciendo que la “pornografía es para los perdedores” y que “es un desperdicio aburrido y una salida fácil para personas demasiado holgazanas como para ver los frutos de la sexualidad sana”.
Anderson apareció 14 veces en la portada de Playboy, más recientemente en el número de diciembre, cuando la revista publicó su última tapa con desnudos.