Incluso el estricto protocolo de Cannes se modificó un poco para que fuera la actriz, y no la directora del filme, la que pisara primero la alfombra, antes que el resto del equipo y en solitario.
Después de dejarse fotografiar, con aspecto ligeramente nervioso, Roberts retrocedió para unirse a sus compañeros y ya, todos juntos, comenzar el, corto en distancia y largo en tiempo, paseo por la alfombra roja.
Roberts, Foster -de negro con cuerpo plateado-, Clooney con su esposa -que llevaba un vestido de gasa amarillo con un hombro al aire-, Dominic West y Jack OConnell comenzaron el paseo todos juntos para luego separarse para posar ante los fotógrafos.
Era uno de los elencos más esperados de esta edición de Cannes especialmente por la primera presencia de Julia Roberts, que antes de su paso por la alfombra dijo a la televisión oficial del festival que no había estado antes porque esperaba “la ocasión adecuada” .
Antes de la llegada del equipo de Money Monster habían pasado por la alfombra roja Susan Sarandon, de negro y escote generoso, seguida de Naomi Watts, Jessica Chastain, Eva Longoria, o los miembros del jurado de la sección Una cierta mirada, entre los que está el actor mexicano Diego Luna.
También la británica Vanessa Redgrave, junto al realizador James Ivory, que la dirigió en Regreso a Howards End (1992) , película que va ser proyectada hoy en la sección Cannes Classic con una copia restaurada.
Y como nota diferente, la presencia en la alfombra del actor de cine pornográfico Rocco Siffredi.
“¡Una sonrisa, Julia!” era el grito más escuchado hoy en el Palacio de Festivales de Cannes, al que la actriz llegó con pantalones y chaleco grises con raya diplomática y camisa blanca. Y, para no decepcionar a nadie, con una sonrisa que no desapareció un instante de su rostro.