El artista estaba casado con la destacada artista guatemalteca Rina Lazo, quien fue su compañera de vida por más de 60 años. Ella también fue alumna de Diego Rivera y ahí se conocieron con García Bustos.
El historiador Mynor Carrera explica que tanto García Bustos como Lazo vivieron en el país e hicieron un trabajo artístico y político en el que promovieron un pensamiento progresista y socialista.
La pareja se mudó a Guatemala. En esta época García Bustos hizo un taller de grabado y enseño su técnica a artistas guatemaltecos. Se reprodujeron a través del grabado piezas de denuncia social.
“Para Guatemala tener estas piezas de manera oficial es un gran legado que se dará a conocer a toda la población, parte de la historia sensible que casi nadie quiere hablar como la caída de Jacobo Árbenz y el comienzo de otra época que nos llevó a la guerra civil. Es una fuente de historia para comprender mentalidades de esa época”, dice Carrera.
La misma Lazo, en una entrevista con Prensa Libre en 2015 dijo de esta época ” la revolución tenía sus primeros brillos. Regresé al país para fundar junto a Luis Cardoza y Aragón la Casa de la Cultura. Era una época revolucionaria con muchas propuestas. Éramos un referente como país. Ernesto El Ché Guevara nos visitó para conocer qué estábamos haciendo y observó que los logros revolucionarios que alcanzamos necesitaban mucho esfuerzo”, expresó.
Sobre la caída de la revolución expresó que significó una tristeza para todo el mundo intelectual. “Todos los logros alcanzados fueron minimizados y muchos tuvimos que salir del país. Fue muy lamentable”, recordó en ese entonces la artista.
En el catálogo de una exposición homenaje a García Bustos que mostraba parte de su obra entre 2017 y 2018 también se documenta que a su regreso a México en julio de 1954, Arturo fue a visitar a su maestra Frida Kalho y se sorprendió al ver que en la puerta de la casa de Frida y Diego se encontraban entrecruzadas las banderas de Guatemala y México como una muestra de la solidaridad de los maestros con la causa. Pocos días después la destacada figura mexicana dejó de existir, el 13 de julio.
Las piezas en Guatemala
Desde 1997 los maestro García Bustos y Lazo confiaron obras al Musac. Por ejemplo, en este lugar se encuentra el fresco Tierra Fértil de Guatemala que pintó para el Instituto Italiano en 1954. A los años, como parte del mantenimiento lo iban a cubrir de pintura vinílica, así que la Universidad de San Carlos se encargó del rescate y fue donado a Musac.
La actual donación que comenzó trámites desde 2019 consta de 52 obras, 47 grabados de García Bustos, así como cuatro, de Lazo, más un óleo de la guatemalteca llamado Elotes. Estas obras están valoradas en medio millón de quetzales, aunque las autoridades resaltan que en materia histórica y artística es invaluable.
Recientemente la arquitecta García Lazo también donó un bodegón de Lazo, al Museo de Arte Moderno Carlos Mérida.
La arquitecta García Lazo comenta que las obras donadas fueron una selección de sus padres en vida. Castillo expresa que es de gran valor para la institución y un compromiso para seguir divulgando el patrimonio y para que sean conservadas.
Parte de la colección incluye la creación de la serie Porque esta tierra volverá a nacer… Testimonio de Guatemala entre 1953 y 1954, por el contexto que vivió en la década revolucionaria, conocida como la primavera democrática, agregando un reconocimiento más a su trayectoria internacional. La misma consta de reproducciones en xilografía, linóleos y aguafuertes, en negro y a color.
García Bustos realizó en México, en 1955 estos grabados que expuso en 1956 en la Biblioteca del Estado, en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, y en la Escuela Nacional de Bellas Artes de la Universidad Central, en Ecuador.
García Lazo explica que esta donación es para que sea exhibida y que el pueblo guatemalteco disfrute de ese mensaje social que él dejó”, agrega. La fecha propuesta para la exposición será en octubre próximo.
En el año de la pandemia
Entre los trabajos de García Bustos destacan importantes pinturas murales como la de Pobladores de las Siete Regiones de Oaxaca, fresco de 50 metros cuadrados en el Museo Nacional de Antropología, y Cosmogonía de los pueblos indígenas del Estado de Oaxaca, fresco de más de 120 metros cuadrados, en las escaleras monumental y lateral izquierda del Palacio de Gobierno de Oaxaca.
En el 2020 se editó el libro Hilvanando trozos de historia, en el que se habla sobre de los famosos murales en Oaxaca del mexicano y de otros artistas. El mismo fue repartido entre los estudiantes de Oaxaca. Un ejemplar fue donado a la biblioteca de Musac. La arquitecta Lazo también donó un video llamado Trazos de vida.