Según los medios locales, la propia Madonna se presentó el miércoles al tribunal de Jilongwe, en compañía de dos niños de corta edad, no identificados, así como de otras personas para entrevistarse con un juez.
“El tribunal examina una demanda para determinar si Madonna puede o no adoptar a dos niños” dijo a la AFP Mlenga Mvula, portavoz del tribunal de Lilongwe.
“El procedimiento de adopción requiere una sentencia del tribunal”, prosiguió, y se negó a dar la identidad de los niños y del hospicio donde viven.
La cantante estadounidense, de 58 años, llegó a Malaui a bordo de un avión privado y reside en las afueras de la capital, según estos medios.
Madonna ya estuvo en Malaui -país que visita con frecuencia– en julio pasado, junto a sus dos niños adoptados.
Ahí supervisó su fundación, llamada “Raising Malawi”, que incluye un centro quirúrgico para niños en el hospital Queen Elizabeth de la capital comercial del país, Blantyre.
Una presencia controvertida
Tras las adopciones que ya hizo en Malaui en 2006 y 2009, sus frecuentes estadías en este pequeño y pobre país de África austral han generado a veces polémica.
En 2013, la entonces presidenta Joyce Banda le había reprochado su comportamiento un tanto arrogante frente a las autoridades, al exigir un tratamiento VIP y presumir de forma exagerada de su generosidad ante el país.
Desde que Banda dejó el poder en 2014, las relaciones de la estrella con el nuevo presidente Peter Mutharika son mejores, y éste afirmó que su gobierno estaría “siempre agradecido por la pasión de Madonna hacia el país”.
Madonna creó la fundación “Raising Malawi” en 2006, y afirma haber entregado millones de dólares para financiar hospicios y otras instituciones de protección de huérfanos en Malaui.
La cantante, que tiene cuatro hijos, es considerada por los medios como una de las mayores donantes para proyectos infantiles en Malaui, considerado por la ONU como uno de los 20 países menos desarrollados del planeta.
El sábado, Madonna fue vista en la manifestación de protesta en Washington contra el presidente estadounidense Donald Trump, un día después de su toma de posesión. La cantante hizo campaña por la derrotada rival demócrata de Trump, Hillary Clinton.
