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Pero Lenín también estuvo al tanto de otros proyectos, otros sonidos y en colaboración con más artistas, con quienes mantuvo una importante relación profesional y personal.
El gran amor de Lenín fue la batería, aunque también exploró con más percusiones en otros proyectos, además de tocar la guitarra y cantar.
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Estas son algunas de las canciones más representativas de la carrera de Lenín Fernández.
Como un duende
Una de las canciones más reconocidas de Alux Nahual. El golpe del bombo junto a uno de los platos de la batería preparan el ingreso de la voz de Álvaro Aguilar. La fortaleza de los sonidos de Fernández emocinaron al público en varios conciertos.
Alto al fuego
Las canciones de Alux marcaron a generaciones del rock nacional. Tuvo que ver en ello Alto al fuego, donde se muestra más el ritmo que Lenín impuso a la música de la banda.
Espiral
Lenín colaboró con varios artistas como productor y músico. Junto a Magda Angélica exploró otra de sus pasiones en la percusión, y acompañó ese sonido influenciado por la naturaleza y la cosmovisión maya.
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Money
Como expresó en alguna ocasión, la batería fue el gran amor de Lenín. Y también en otros proyectos. Además de producir, fue batería junto a Tavo Bárcenas, en canciones que lo mantuvieron cerca del rock.
Bola de ladrones
En una faceta más personal, Lenín también cantaba y tocaba la guitarra. No tuvo temor a decir lo que pensaba y este tema, en todo de denuncia, lo demuestra.
Tierra de la dulce espera
Su voluntad de colaborador también la consolidó con Centroamérica. En La Orquesta de la Papaya, un conjunto de artistas de la región, exploró diferentes sonidos y dejó su huella como percusionista.