La 57 edición de los Grammy, en la que Sam Smith, Beck y Beyoncé fueron protagonistas, fue seguida por 27 millones de espectadores.
Según publicó Deadline, el traslado de la gala del domingo al lunes es temporal y responde al interés de la organización de evitar una pérdida de audiencia por la celebración el domingo del Día de San Valentín (14 de febrero) en un fin de semana que se prolonga hasta el lunes por la jornada festiva por el Día del Presidente.