Se espera que en esta edición la empresa de Jack Ma celebre un macroevento en la ciudad sureña de Shenzhen, donde acudirán otras estrellas internacionales cuyo nombre aún no ha trascendido.
El año pasado, Alibaba logró ventas récord de US$14 mil 300 millones en ese día e invitó a su gala, celebrada en el Cubo de Agua de Pekín -el estadio de las piscinas olímpicas de la capital- a famosos actores, como Daniel Craig o Kevin Spacey, para que le ayudaran a batir récords.
En esta ocasión, la empresa también organiza una intensa campaña de publicidad que comenzará la próxima semana y se prolongará hasta el día de las compras masivas, con nuevas iniciativas que intentan tender puentes entre la venta por internet y física.
Entre ellas, Alibaba organizará un desfile de moda de ocho horas en Shanghái que será transmitido en directo en las aplicaciones de móvil de sus mercados virtuales, y que permitirá que los interesados en las prendas que se exhiben puedan reservarlas de forma inmediata con sus teléfonos a medida que aparecen en la pasarela.
La empresa que se identifica con la silueta de un gato también ha creado un juego de realidad aumentada para móviles, similar al popular Pokémon Go, en el que los usuarios deberán perseguir a la mascota de la firma para conseguir descuentos o promociones que encontrarán en diferentes ubicaciones por las que pasen.
Todo ello para tratar de conseguir que, un año más, Alibaba supere las cifras de las ediciones pasadas en esta festividad de las compras inventada por la propia compañía en 2009, y a la que se han ido sumando sus competidores a la vista del éxito.
