Él, que apuntaló los cimientos de la industria mundial de la música en español mucho antes de que nadie pudiera atisbar qué sería eso de escuchar audio en “streaming”, regresa a los 73 años y a punto de cumplir 50 de carrera con un nuevo trabajo.
“Las emociones en las conferencias de prensa surgen de manera muy espontánea y luego te das cuenta del error. Yo no entiendo mi vida sin el estudio de grabación” , se retracta después de retomar el repertorio del previo “México” (2015) , esta vez rodeado de grandes amigos y artistas como Juan Luis Guerra, Plácido Domingo, Joaquín Sabina, Pablo Alborán, Omara Portuondo, Andrés Calamaro o Thalía.
Para sus compañeros de viaje en este homenaje al cancionero de ese país (que repasa clásicos como Se me olvidó otra vez o Usted) solo tiene buenas palabras (“han puesto su alma al cantar y lo han hecho mucho mejor que yo”, afirma) , igual que para la tierra del maestro José Alfredo Jiménez o de Juan Gabriel, que le ha proporcionado el material.
“Es el país que más he conocido. Es un país grande, donde empiezan a cantar en Tijuana y acaban en Tapachula. Los años 1950 y 1960 de México son años para la música hispana imborrables”, explica.
Entre los temas, no obstante, se cuela un tema con sello español, Y nos dieron las diez, de Joaquín Sabina, junto al que trenza su primer dueto juntos.
“Hablé con él media hora por teléfono para darle las gracias. Fue una conversación histórica que a mí me llenó el alma. Además de un artista descomunal es un grandísimo hombre”, destaca.
Hablar de México supone hablar además de un país de emigrantes y en su defensa salió durante la pasada campaña electoral de EE.UU., cuando calificó al entonces candidato Donald Trump de “payaso” y prometió que no volvería a actuar en ninguno de sus casinos.
“Ahora es presidente. La impresión que tengo del Trump del principio es la de un hombre irascible, cerca de un comediante. Hoy le daría un poco más de tiempo para ver si es capaz de remediar todas las tonterías que dijo en su campaña”, dice antes de apostillar que cree que “sigue siendo el mismo hombre complicado”.
Sentado frente a la cámara luciendo el tono tostado al que solo él parece proclive, Iglesias asegura que se encuentra “perfecto de salud” y recuperado tanto de la operación de espalda por la que fue intervenido en 2015 como de la ciática que a principios de 2016 le obligó a posponer algunos shows.
“Cuando nos despertamos los que tenemos más de 30 años, siempre nos duele algo. La ciática ahora solo un poco de vez en cuando si hago ejercicios un poco raros, pero estoy perfecto”, insiste.
Anuncia, de hecho, que en 2018 estudia realizar “sobre todo por España” una gran gira de conciertos para “dar las gracias” a la gente “por tantas cosas” que le han dado al cumplirse sus 50 años de carrera musical.