La denuncia, planteada en un juzgado de Los Ángeles, refiere que la conducta del actor y otros miembros de la escuela Studio4 generó un ambiente de abuso y explotación sexual, informó la revista Vanity Fair.
Uno de los momentos en el que las mujeres se sintieron violentadas se refiere a una escena de sexo grupal donde las mujeres fueron obligadas por Franco a quitarse una protección íntima.
Ambas mujeres coinciden en que Franco y Studio 4 tenían como propósito estafar a las alumnas desprevenidas, su dinero y talento para servir los deseos financieros y de explotación sexual, donde las mujeres que accedían a quitarse la ropa “recibían un trato preferencial”.
Las denunciantes son Sarah Tither-Kaplan y Toni Gaal. En el caso de la primera, ya había acusado a Franco en un artículo de Los Angeles Times.
“Una tiene fe en esta gente, en su credibilidad y confía que no sacarán provecho de la situación. Es alarmante que uno pueda ser manipulada porque está en una situación vulnerable”, dijo Gaal.
En el programa Late Show, el propio actor se defendió de las acusaciones.
“En mi vida, me enorgullezco en asumir la responsabilidad por las cosas que he hecho. Y tengo que hacer eso para mantener mi integridad”, dijo.
Al tiempo que señaló que lo que se decía en redes sociales es impreciso, dijo que apoyaba a las personas que alzan su voz “porque por mucho tiempo no tenían esa opción”.