Se ganó un nombre en la industria musical por méritos propios, aunque, con el paso de los años, sus problemas con la ley y su relación con las drogas comenzaron ganar terreno en los medios respecto a sus álbumes y conciertos.
La última vez que sus temas estuvieron en el “top 10” en el Reino Unido fue en 2004 -Flawless (Go To The City) y Amazing-, y en 2008 anunció su intención de retirarse de los escenarios, aunque tres años más tarde retomaría parte de la actividad.
Hijo de un grecochipriota y una británica, Michael nació el 25 de junio de 1963 en al barrio de East Finchley, al norte de Londres, con el nombre real de Georgios Kyriacos Panayiotiu.
Saltó a la fama cuando todavía era un adolescente, a principios de la década de 1980, tras formar con su compañero de escuela Andrew Ridgeley Wham!, dúo con el que lograron éxito tras éxito -Club Tropicana, Young Guns (Go For It) y Last Christmas, entre otros-.
Rompieron esa sociedad cuando estaban en lo más alto, con la publicación de un último sencillo, The Edge Of Heaven (1986), que volvió a ser un éxito de ventas, y con una serie de conciertos en el estadio de Wembley.
Ese fue el comienzo de la brillante carrera en solitario de Michael, que colaboró en ocasiones con artistas como Aretha Franklin, Elton John y la banda Queen -tras la muerte de Freddie Mercury-.
Su primer álbum como solista, Faith, fue un éxito de ventas multimillonario en 1988, aunque abrió una larga batalla legal entre el cantante y la compañía Sony, de la que trataba de desligarse.
A ese trabajo le siguieron Listen Without Prejudice Vol. 1, en 1990, Five Live (1993), Older (1996) y Songs from the Last Century (1999), entre otros.
Las turbulencias comenzaron a desatarse en 1998, tras años en los que había rehusado pronunciarse sobre su homosexualidad, cuando fue detenido en unos baños públicos en California (Estados Unidos) por “realizar actos obscenos”.
Ese incidente, que él mismo parodió poco después en el vídeo Outside, le llevó a declarar abiertamente que era gay, así como su relación con el estadounidense Kenny Goss.
Michael volvió a protagonizar portadas de periódico cuando en 2006 fue detenido por la policía londinense dormido al volante de su BMW en estado de embriaguez, supuestamente agravado por consumo de cannabis.
En 2008 anunció su intención de dejar de dar conciertos y alejarse de la luz pública, pero tan solo un mes después volvía a estar de nuevo en el foco mediático, al ser detenido por posesión de cocaína y otras sustancias.
En 2010, Michael recibió una sentencia de ocho semanas de prisión por un incidente en el que estrelló su Range Rover contra una tienda en el norte de Londres.
Un año después, anunció oficialmente el final de su problemática relación de 15 años con Goss, aunque aseguró que se habían separado dos años antes, y en 2012 trató de relanzar su carrera musical con una actuación en la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de Londres.
Durante la última década de su vida le persiguieron los problemas de salud. La estrella del pop estuvo al borde de la muerte en 2011 debido a una neumonía por la que le tuvieron que practicar una traqueotomía.
Volvió a estar ingresado 18 meses después por una lesión en la cabeza provocada durante un extraño incidente en una autopista británica en el que cayó del vehículo en el que circulaba.
Su muerte, que la policía ha calificado de “inexplicada, pero no sospechosa” se produjo “durante el periodo navideño”, según su representante, que informó del fallecimiento durante la noche de Navidad.