“Las hice completamente diferentes: planetas diferentes, naves espaciales diferentes, para convertirlas en nuevas”, añadió el creador de Star Wars.
Lucas se refirió a los filmes de la popular saga de ciencia-ficción como sus “niños”, a los cuales había “amado” y “creado”, y afirmó que ahora los había vendido a “esclavistas blancos”, un calificativo luego del cual se quedó en silencio y después empezó a reír.
El director vendió la franquicia galáctica de Star Wars a Disney en el 2012 por US$4 mil millones.
Además, Lucas señaló que los nuevos dueños no estaban interesados en sus ideas para las nuevas películas, por lo que apostó porque cada parte del acuerdo siguiera su propio camino.
Star Wars: The Force Awakens, la séptima entrega de la saga, batió hace poco el récord del estreno más taquillero de todo el mundo y en sus dos primeras semanas en los cines superó los US$1 mil millones de recaudación en taquilla.