Escenario

Esculturas quedan sin identificación

Monumentos erigidos en el siglo XX en homenaje a personajes relevantes de la historia del país y que ornamentan vías capitalinas, como la Avenida La Reforma y Avenida de las Américas, han perdido su integridad artística a causa de la sustracción masiva de las placas de bronce que las identifican.

Esto ha ocurrido debido al comercio ilegal de metales, por lo que la Municipalidad de Guatemala continúa el proceso de remoción de las inscripciones que quedan, para resguardarlas.

El ejemplo más reciente lo constituye el monumento en honor del político y escritor Lorenzo Montúfar, ubicado en la 12 calle y Avenida La Reforma, obra de Rafael Rodríguez Padilla, cuyas placas de bronce que se pensó en un comienzo que habían sido hurtadas fueron retiradas por la Dirección de Monumentos y Parques y la Dirección de Medioambiente de la comuna, con acompañamiento del Instituto de Antropología e Historia (Idaeh).

Algunas cifras

Según el listado proporcionado por el Idaeh, de las 77 placas contabilizadas en las avenidas mencionadas, 39 han sido desmontadas de monumentos, entre estos: Plaza y fuente al periodista, Plaza Venecia, Plaza México, Plaza Chile, Club Rotario —varios medallones—, Bernardo O’Higgins y general José María Reyna Barrios. Todavía quedan pendientes de retirar 10 inscripciones.

De acuerdo con registros, 19 placas han sido robadas. Estas pertenecían a esculturas como la de Juan Pablo II, José Joaquín Palma y Rafael Álvarez Ovalle —Monumento al Himno—, David Vela, José de Irisarri, Plaza Argentina y Plaza Costa Rica.

“Se decidió retirarlas, hasta que se les dé un adecuado sistema de seguridad”, dijo el arquitecto Leonel López, del Idaeh. “Es preocupante. A pesar que estamos haciendo estas diligencias, todavía la semana pasada, al actualizar nuestro listado, se robaron más placas”, lamentó.

Según el funcionario, aún no se tiene la certeza de cuándo volverán a ser colocadas en su sitio original, aunque también se contempla la posibilidad de exhibirlas en algún sitio, al ser piezas patrimoniales de gran relevancia.

Opiniones

El investigador y crítico de arte Guillermo Monsanto recomendó hacer moldes de todos los monumentos que se exhiben en las calles, para que se puedan reponer con réplicas exactas en caso de pérdida o deterioro, como se ha hecho en México o en Europa. “Hay instituciones que estarían dispuestas a rescatarlos”, dijo.

El escultor guatemalteco Max Leiva, quien funde sus obras en México en bronce de alta calidad, porque en ese país es más barato, comenta que en Guatemala no se produce este metal, por eso las placas de bronce que desaparecen paran en fundidoras que las compran.

La ingeniera Carla Gordillo, profesora del Centro de Estudios Superior de Energía y Minas, de la Universidad de San Carlos de Guatemala, indicó que el bronce es una aleación de metales como estaño, hierro y cobre. Este último no se produce en el país y escasea, por lo que es valioso para recolectores de chatarra.

“Una forma fácil de obtenerlo para ganarse la vida es robándolo, ya sea de monumentos o de cementerios. En Guatemala estas placas nunca más vuelven a aparecer”, añadió.

“Si el Estado no tiene la conciencia de lo que valen y de su importancia, entonces ¿cómo le va a asignar un presupuesto para cuidarlos?”, concluyó Leiva.

ESCRITO POR:

Brenda Martínez

Periodista de Prensa Libre especializada en historia y antropología con 16 años de experiencia. Reconocida con el premio a Mejor Reportaje del Año de Prensa Libre en tres ocasiones.