¿Cuándo empezó a trabajar en Ixcanul?
Comencé en abril 2013, aunque la historia la guardo conmigo desde hace unos años. El trabajo de escritura se dio rápido, muy alimentado por talleres de expresión que realicé con mujeres de la comunidad cakchiquel, quienes me contaron sus historias respecto al tema que quería tratar.
¿Cómo nació la idea de la historia?
Fue gracias al encuentro con María, una mujer cakchiquel de la cuenca del lago de Atitlán. Me la presentó mi madre. Ella me contó su historia —la querían obligar a casarse con alguien que ella no quería—. Lo único que quería era entender cómo le pudo pasar a ella. No buscar culpables, solo entender por qué a ella. Así comencé esta historia, preguntándome las razones por las que pasan las cosas. Qué nos lleva a estar en el preciso momento para captar una oportunidad.
¿Cuándo estará lista la producción?
El estreno de la película se hará en Berlín, en la selección oficial. Después se mostrará en diferentes circuitos de festivales en donde además hay distribuidores que las escogen para proyectarlas en salas de cine. Tenemos la suerte que nuestra película comience su vida en uno de los mejores festivales, clasificado de clase A. Esto le dará visibilidad mundial.
¿Se proyectará en Guatemala?
Claro. La presentaremos el año próximo y esperamos poder hacer una proyección en la aldea El Patrocinio, comunidad que tanto nos ayudó con la realización de la cinta
¿Cómo se siente de que su trabajo haya sido seleccionado para competir en la Berlinale?
Es realmente una dicha, para mí y para el equipo. Aunque fuimos pocos en este proyecto, comparado con las grandes producciones, somos un equipo enorme. La película se hizo con apoyo de muchos amigos y de gente tanto de Guatemala como de otros países que creyeron en el proyecto.
Es la primera cinta guatemalteca que compite en la Berlinale.
Es un honor ser el primero. Ser parte de la Berlinale y competir en la selección oficial al lado de grandes directores es un gran honor. Ahora, que nuestro cine comienza a salir al mundo, espero que esta primera visibilidad sirva para que las puertas de la producción y el apoyo al cine se abran para otros proyectos en Guatemala, uno de los pocos países de Centroamérica que no cuenta con fondos para la producción de cine.