Fue antes de la 92a edición de los Óscar que la Academia finalmente organizó el viernes una visita de periodistas al sitio, que no se encuentra en Hollywood, sino unos pocos kilómetros más al sur.
Una gigantesca esfera de vidrio, acero y concreto, que se encuentra al costado del museo, parece flotar sobre el suelo para encarnar “la magia del cine” y se conecta por pasarelas al edificio principal.
La misión del museo, que alberga una sala de cine de mil butacas equipada con la última tecnología, es volver sobre la historia del cine y sus innovaciones, así como mostrar a los visitantes las distintas técnicas utilizadas para hacer una película.
En materia de curiosidades, se podrá ver en las ventanas las famosas zapatillas rojas de Judy Garland en “El mago de Oz”, las puertas del ficticio “Rick’s American Café” frecuentado por Humphrey Bogart en “Casablanca”, o la capa de Drácula usada por Bela Lugosi en la película de 1931.
También habrá recuerdos de Kirk Douglas, la leyenda de Hollywood que murió el miércoles a la edad de 103 años.
“Somos allegados a la familia Douglas. Tenemos objetos relacionados con Kirk, su historia será contada en el museo”, dijo a la AFP su director, Bill Kramer.
Cuando las estrellas del cine se apagan, este museo “ayudará a contar sus historias, esa es la misión que nos hemos propuesto”, agrega.
El edificio, cuya construcción está casi terminada, tendrá más de 3.600 m2 de galerías y salas de exposiciones.
Para su inauguración oficial, el museo organizará una retrospectiva dedicada a Hayao Miyazaki, cuyas obras maestras de animación del estudio Ghibli (“Mi vecino Totoro”, “La princesa Mononoke”, etc.) a menudo han sido seleccionadas para los Óscar, un premio que el cineasta japonés ganó en 2003 con “El viaje de Chihiro”.
Luego habrá una exposición sobre la historia de los directores negros estadounidenses y su contribución al cine.
Los Óscar fueron nuevamente criticados este año por su falta de diversidad étnica y cultural. A excepción de la británica Cynthia Erivo (“Harriet”), todos los actores y actrices nominados son blancos y ninguna mujer ha sido seleccionada entre los directores.
El Museo del Cine quiere contribuir a un cambio en ese campo, “contando toda la historia” del séptimo arte “en su gran diversidad”, insistió Kramer.
Contenido relacionado:
>Óscar 2020: Cuál será el menú (y las sorpresas) de la gala de Hollywood
>Eric Vonn: Los productores de Guatemala deben apostar al público internacional
>Pandemia, la docuserie de Netflix que alerta sobre los virus más letales