Rowley para este trabajo se inspiró en la propuesta del psicólogo y psiquiatra Carl Gustav Jung. Durante casi año y medio se dedicó a crear estas piezas.
Jung es considerado uno de los psicoanalistas más influyentes del siglo pasado. Hablaba del inconsciente colectivo y los arquetipos, conceptos para comprender la mente a nivel individual y social.
Dentro de los arquetipos define los llamados Anima y Animus, siendo anima el arquetipo femenino dentro del inconsciente colectivo de los hombres y Animus el arquetipo masculino dentro del inconsciente colectivo de las mujeres.
Anima es entonces la feminidad, el vínculo con otros, las emociones y sensibilidad, mientras animus se define como el mundo de las ideas y la fuerza. Según la teoría de Jung, la finalidad es un equilibrio entre ellos y la armonía.
“De esto trata la exposición de trabajar estos conceptos para ser una persona integrada a la consciencia colectiva, aceptar nuestro anima animus saber que puede ser sentimental, pero también tener el valor y la fuerza”, agrega Rowley.
La curadora independiente Marcela Valdeavellano-Valle invita al público a explorar la pinturas y esculturas de Rowley y a preguntarse cuál es el valor intrínseco de su propuesta conceptual.
“La energía de la psique en su obra tiene una tendencia y una finalidad: la integración y síntesis de elementos psíquicos divididos, lo cual incluye los elementos femeninos y masculinos relegados al inconsciente”, dice la curadora.
“Sus pinturas en técnicas mixtas reflejan una fuerza femenina todopoderosa que encarna la naturaleza, la fertilidad, la creatividad y la sororidad, mostrando mucha fuerza interior a través de su dinamismo, ya sea como una expresión abstracta o figurativa. Encontramos en su arte ese camino para el empoderamiento femenino y la importancia de la hermandad de mujeres a través de sus diversas imágenes y técnicas”, concluye Valdeavellano-Valle.
Al visitar la obra
En este trabajo se observa su técnica en la que domina el óleo y carboncillo, sin dejar de presentar esculturas en mármol, esteatita, serpentina y alabastro. En total son 17 piezas en un recorrido lleno de elementos a descubrir.
Aquí comentamos algunas de las interpretaciones de la creadora, aunque cada persona podría encontrar sus propias formas de comprenderlas.
Edén
En ella observará un díptico que nos lleva a una representación de Adán y Eva, un encuentro con otra teoría de la creación del mundo que expresa las energías masculinas y femeninas. Los une el mismo cordón umbilical.
Pangénero
Una pieza de mármol verde que al observarla desde diferentes ángulos tiene formas masculinas y femeninas.
Le cuchubalé
En esta obra las mujeres comparten en una tradición guatemalteca llamada cuchubal, un mecanismo de financiamiento en que un grupo se reúne por lo menos una vez al mes para intercambiar dinero y ahorrar entre todos, también se acostumbra a compartir un momento social. En esta obra se representa a las mujeres y trata del sentimentalismo mientras cuentan sus penas y alegrías, descansando entre ellas en las que encuentran hermandad.
Luz del horizonte
Formas o almas saliendo del ombligo. Las mujeres nutren y dan cuidados a quienes están alrededor.
Qué bella soy
El ánima a su máxima expresión. El exceso que también es necesario para sentirnos bellas, estar feliz con nosotras física e interiormente.
El rapto
Una interpretación de la obra de Peter Rubens llamada el rapto de las hijas de Leucipo, pero en esta propuesta expresa la lucha masculina que quiere ocultar su parte femenina.
Momentum
Un encuentro con el universo. Caos en cuanto peleamos con nuestra energía masculina y femenina y donde no queremos aceptar lo que sentimos.
Filigranas
Entrelazados que ejemplifican la consciencia colectiva. El vivir en más equilibrio.
Un encuentro con la artista
Rowley estudió arte en Canadá y Estados Unidos, en 1986 y 1988, obtuvo varios premios en las Bienales Paiz y en la Bienal de Escultura Carmen Pettersen.
Aunque en los últimos años ha participado en diferentes colectivas, la última exposición individual fue en 2015, en esa ocasión trabajó el tema Ponte en mis zapatos y buscaba una reflexión interna sobre cómo los zapatos transforman al humano, o viceversa.
En el 2018 recibió el Premio Artista del Año XXXVIII, como extranjera destacada. ha destacado por ser fundadora, directora y curadora del colectivo Cinceles, un grupo de casi 40 escultores que trabajan desde el 2009 en talleres continuos y exhibiciones.
Podría interesarle: Colectivo guatemalteco Cinceles y sus 10 años de transformar las piedras
Rowley explica que en Guatemala se ha trabajado el barro, resina y bronce, pero pocos se han atrevido a hacer de la piedra su material predilecto.
Contenido relacionado:
>La tecolotera es la más reciente exposición de Ramírez Amaya
>Después de 24 años de la muerte de Grajeda Mena, su nombre sigue vigente en nuevos proyectos
>Los italianos Colombo y Cattelan exponen en el Museo de Arte Moderno