A estas alturas, no resulta extraño ver el Centro Histórico de la ciudad de Guatemala como un pequeño epicentro literario dividido por unas cuantas cuadras donde conviven las bibliotecas Luis Cardoza y Aragón, César Brañas, La Teca, la del Centro Cultural de España, junto a librerías como Piedrasanta o la del Fondo de Cultura Económica, entre otras.
El listado no acaba allí. Hacia finales del 2022, el conglomerado de espacios destinados para los libros en el centro se expande con llegada de dos nuevas librerías impulsadas por la Editorial Catafixia y De Museo, las cuales fueron inauguradas durante la primera quincena de diciembre.
En medio de grandes expectativas y luego de casi diez años de negociaciones, el pasado 15 de diciembre del 2022, De Museo abrió las puertas de su tienda número diez; la segunda fuera de un centro comercial y la primera en la zona 1 capitalina como un acto de reivindicación a la historia de este pedazo urbano.
“La ciudad se fue fragmentando y el Centro Histórico se convirtió en uno de los pocos lugares donde muchas personas pudimos coincidir, por eso queríamos llegar acá. Creemos que es un lugar que necesita seguir reactivándose culturalmente”, explica Giovanni Pasarelli a propósito de la inauguración de la décima sucursal de las tiendas De Museo, las cuales dirige.
La apertura del nuevo recinto ocupará el antiguo espacio donde por más de 140 años habitó el almacén de textiles Los Dos Leones, ubicado en la 8ª calle, 8-12, de la Zona 1.
Giovanni Pasarelli explica que, por más de diez años, el Centro Histórico se mantuvo como un territorio pendiente por explorar para la venta de libros y objetos de la tienda. Gran parte de ese afán ha radicado en la historia personal de Pasarelli y su socio, Ricardo Recinos, ya que ambos crecieron en la zona 1 y con el tiempo quisieron resignificar De Museo en este contexto.
La nueva librería, edificada sobre una estructura con un aproximado de 800 metros cuadrados conserva parte de su estética original. Además de mantener un piso en mosaico monocromático también muestra inmobiliario del siglo XX tallado en madera de caoba por carpinteros alemanes.
El amplio tamaño y la accesible localización de la nueva tienda permiten que el recinto pueda hibridarse hacia un centro cultural donde se pretenden realizar clubes de lecturas, conversatorios, presentaciones de libros y talleres, según cuenta Pasarelli.
Dentro de la histórica tienda, los clientes podrán acceder a un abanico de títulos que suelen nutrir las libreras de las 10 tiendas, así como podrán encontrarse los tradicionales objetos que perfilan la marca De Museo: habrá desde artículos decorativos y juguetes, hasta accesorios de moda, aromas, inciensos y aceites.
La nueva sucursal De Museo podrá visitarse de lunes a sábado desde las 9 a las 18 horas y los domingos de 10 a 17 horas.
A 300 metros, en el perímetro de la Plaza de la Constitución, donde el tránsito peatonal, el vehicular ni el ruido se detienen, permanece de forma soberbia desde la década de 1930 el Pasaje Rubio, ese histórico centro comercial que alberga joyerías, restaurantes, barberías, y desde diciembre del 2022, a la primera librería de la Editorial Catafixia.
Fue a partir del pasado 7 de diciembre, en el local #7 del Pasaje que los editores y poetas Carmen Lucía Alvarado y Luis Méndez Salinas, inauguraron un espacio para los sedientos y curiosos de la palabra escrita en español.
El espacio, que se propone como una isla de ideas en medio de la actividad comercial popular y donde también se pueden encontrar libros editados “para anular el silencio” –tal y como reza una frase estampada en uno de los muros de la librería–, está compuesto por 80 metros cuadrados en los que habitan más de dos mil volúmenes publicados.
Según apunta Carmen Lucía Alvarado, en este nuevo inmueble que había permanecido abandonado por 14 años y donde por mucho tiempo también operó una librería, las personas podrán acceder a publicaciones de novela, poesía, ensayo, y cuyos fondos temáticos abarcan memoria histórica, ciencias sociales, música, espiritualidad, y una gran inclinación a la poética.
Esta nueva librería propone un salto al reforzamiento del vínculo emocional, didáctico e intelectual de Alvarado y Salinas con sus lectores. “Esta ruta se ha definido muchísimo desde la fidelidad hacia lo que sentimos”, expresa Carmen Lucía.
Además del amplio catálogo de publicaciones trabajadas por Catafixia, en el nuevo recinto del Pasaje Rubio se pueden encontrar libros provenientes de un decenar de sellos argentinos, mexicanos y españoles, así como de las editoriales con mayor presencia en Guatemala.
Otro distintivo en la nueva librería Catafixia refiere a su “Mapa de Lectura”, una sección dentro del recinto que sugiere varios libros bajo una misma narrativa propuesta por los encargados del proyecto que será actualizada cada dos meses.
La primera temática dentro de este mapa apunta hacia la resistencia y como libros medulares se propone Don Quijote de la Mancha y el Popol Wuj.
A partir de estos se deriva una amplia selección de otros libros que refieren a temáticas similares y que fueron curados entre Carmen Lucía Alvarado, Luis Méndez Salinas y el escritor Arnoldo Gálvez Suárez, quien además es uno de los socios de la nueva librería junto a Rodrigo Fuentes, Margarita Cossich, Arturo Angulo y Manuel Huitrón.
Según apunta Luis Méndez Salinas, el trabajo colectivo y la afinidad con personas desde las misma sensibilización por las letras se ha convertido en el mayor garante de este nuevo espacio de imaginación en la zona 1 que puede visitarse de martes a domingo desde las 11 hasta las 20 horas.
“Hemos aprendido que, para crecer y hacer un proyecto de esta naturaleza, se han necesitado efectivamente más cabezas”, comparte el editor, autor y ahora librero.