El joyero Martin Katz, quien desde la década de 1990 es solicitado por las celebridades para que les brinde algunas joyas, afirma que en ese sentido las cosas han cambiado porque ahora son los estilistas quienes se encargan de elegir la joyería y a veces las celebridades no conocen el origen de los accesorios que lucen.
“Era un joyero privado que acababa de empezar a crear diseños propios. En 1991 le mostré algunos artículos a la actriz Sharon Stone y al día siguiente recibí una llamada de ella y me dijo que quería usar alguna de mis piezas para el estreno de la película bajos instintos. Al principio pensé que querría comprarlos, yo no estaba interesado en prestarlos. Al final lo hice”, recordó Katz.
Según el diseñador antes el contacto era más directo y actualmente la selección de las joyas está en manos de los estilistas.
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“Los estilistas a menudo eligen entre cuatro y seis looks diferentes por vestido seleccionado para una clienta famosa. Eso puede significar que han reunido cientos de miles, o tal vez millones, de dólares en joyas”, refirió el joyero.
Katz también dijo que en algunas oportunidades una celebridad puede llegar a solicitar que se le otorgue a manera de préstamo piezas de hasta US$5 millones.
En el 2014 la actriz Margot Robbie lució un collar de diamantes de 60 quilates y un anillo de 14 quilates, valorados en cerca de US$2.5 millones.
El peligro de prestar las joyas en la ceremonia de los Óscar, dice Katz, es que puede ser que pierdan los accesorios sin darse cuenta, por lo que es importante que las piezas estén aseguradas. Además, cuando las joyas son trasladadas a los salones de belleza o residencias de las celebridades, se toman fuertes medidas de seguridad.
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