La actriz Amber Heard no puede pagar a su exesposo y colega Johnny Depp los más de US$10 millones por daños y perjuicios impuestos por un jurado estadounidense que se acabó decantando por la versión de la estrella Piratas del Caribe en un juicio por difamación, dijo su abogada este jueves 2 de junio.
Una larga batalla judicial televisada terminó el miércoles 1 de junio, cuando un jurado de siete personas consideró que Depp y Heard se habían difamado mutuamente.
El jurado obliga a Heard a indemnizar a su expareja con US$10.35 millones (en un inicio eran US$15 millones, pero se redujo) por daños y perjuicios, mientras que Depp tendrá que abonar a la actriz US$2 millones por el mismo concepto.
Consultada en el programa TODAY de la cadena NBC si Heard podrá pagar la indemnización, su abogada, Elaine Bredehoft, respondió: “Oh no, absolutamente no”.
La letrada añadió que Heard tiene intención de apelar el veredicto.
Depp, de 58 años y que ya había perdido en 2020 un caso de difamación en Reino Unido contra el tabloide londinense The Sun por llamarle “golpeador de esposas”, celebró el veredicto del caso como una victoria, mientras que Heard dijo que tenía el “corazón roto”.
El actor demandó a su exesposa por un artículo de opinión que escribió para el diario The Washington Post en diciembre de 2018 en el que se le describía como una “figura pública que representa el abuso doméstico”.
Heard, nacida en Texas (sur) y con un papel estelar en Aquaman, no nombró a Depp en la pieza. Aun así, él la demandó por insinuar que era un abusador doméstico y pidió US$50 millones en concepto de daños y perjuicios.
Heard, de 36 años, le contrademandó por US$100 millones, diciendo que fue difamada por las declaraciones del abogado de Depp, Adam Waldman, quien declaró al Daily Mail que sus afirmaciones de abuso eran un “engaño”.
Bredehoft afirmó que el equipo legal del actor trabajó para “demonizar” a Heard y suprimió pruebas cruciales en el juicio.
“Se permitieron varias cosas en este tribunal que no deberían haberse permitido, y eso hizo que el jurado se confundiera”, dijo.
La abogada aseguró que el fallo es un mal presagio para el movimiento “MeToo” y que desalentará a las mujeres a denunciar el acoso y el abuso sexual.
“Es un mensaje horrible”, alegó Bredehoft. “Es un retroceso importante, porque eso es exactamente lo que significa”, acotó.
“A menos que saques tu teléfono y grabes a tu cónyuge o a tu pareja golpeándote, efectivamente no te creerán”, sentenció.
Por su parte, Depp se congratuló del veredicto: “El jurado me ha devuelto la vida”.
“Lo mejor está por venir y un nuevo capítulo ha comenzado”, sostuvo Depp en un comunicado.