También volvía a llamar la atención del público con el regreso de Leia a la gran pantalla en el Episodio VII de La guerra de las galaxias, que se estrenó a finales de 2015.
Fisher saltó a la fama como la rebelde guerrera Princesa Leia en la trilogía original de Star Wars, cuyas tres películas (1977, 1980, 1983) se convirtieron en un fenómeno cultural.
En una rueda de prensa el año pasado, recordó cómo se divirtió asesinando a su captor, Jabba the Hutt, en El regreso del Jedi. La escena es recordada también por muchos por el bikini dorado que llevaba.
“Me preguntaron si quería que un doble matara a Jabba. ¡No! Es lo más divertido que he hecho como actriz”, dijo entonces. “Si la única razón para actuar es poder matar un monstruo gigante”, añadió.
Desde su nacimiento, en Los Ángeles en octubre de 1956, su vida estuvo marcada por la extravagancia de Hollywood.
Fue el producto del matrimonio entre la estrella de cine Debbie Reynolds, conocida por su papel en Singin’In The Rain (Cantando bajo la lluvia), y del cantante Eddie Fisher. Pero la relación y el hogar feliz en Beverly Hills terminaron cuando Eddie Fisher dejó a Reynolds por su mejor amiga, la actriz Elizabeth Taylor.
A principios de los 80 su vida estuvo marcada por el alcohol, las drogas y la depresión, coincidiendo con papeles fracasados en películas como Under the Rainbow (1981) y Hollywood Vice Squad (1986).
Recibió el aplauso de la crítica por su trabajo en la comedia Cuando Harry conoció a Sally de 1989, pero ya a partir de allí había comenzado a darle la espalda a la actuación para comenzar a escribir.
Se hizo entonces conocida por su honesta escritura semi-autobiográfica, incluyendo su mayor éxito Postcards from the Edge que se convirtió en película en 1990.