Bob Dylan, con más de 50 años de vida artística y ahora ya en la senectud, con una carrera que inició en la década de 1960, ha sido el elegido con el codiciado premio, de cuyo anuncio, divulgado por la prensa hace más de una semana, dijo haberse enterado hasta varios días después, con la inaceptable excusa de no haber revisado su máquina de mensajes telefónicos donde se supone algún emisario de la Academia, le habrá dado el correspondiente aviso.
El galardonado
Bob Dylan, nació en 1941, en Minnesota, EE. UU., bajo el nombre de Robert Allen Zimmerman. En la adolescencia se inscribió con el nombre de Bob Dylan, en homenaje a su autor favorito, el renombrado poeta inglés Dylan Thomas.
En su carrera como autor ha recibido numerosos premios que incluyen el Príncipe de Asturias de las Artes, de España en el 2007 y al año siguiente el también prestigioso premio Pulitzer, de su país.
Opiniones
Este año, la adjudicación del Premio Nobel de Literatura, el debate sobre tal concesión, ha fundamentado el criterio de que no haya sido otorgado a alguno de los numerosos escritores de prestigio que han figurado en el oráculo de la predicción y que ha supuesto que esos presuntos candidatos de por sí han mantenido la respiración contenida en espera de ser favorecidos con tan ansiado premio.
El columnista Paul Wells menciona como merecedores de ese premio a los estadounidenses Joyce Carol Oates, Philip Roth y Richard Ford, entre otros. Lo mismo habrá ocurrido en otros países, en particular España y Latinoamérica, donde habrá una legión de aspirantes a tal distinción.
Ya en el pasado hubo discordia por la adjudicación de ese premio y en España cuando lo recibió el genial escritor Camilo José Cela, hubo círculos literarios que reaccionaron más con envidia que con rencor.
José Luis Borges, que lo merecía de sobra, fue crítico de varios recipiendarios, incluyendo a Miguel Ángel Asturias, de Guatemala. Y dijo también del escritor búlgaro Elias Canetti, quien recibió el Nobel en 1981, no haberlo leído nunca, como que si fuera fácil leer a todos los premiados.
El año pasado obtuvo ese premio la escritora rusa Svetlana Alekesievich, de quien seguro muchos de los famosos escritores de nuestros días nunca habían oído hablar, ni mucho menos leer su obra.
El hecho es que hay un consenso entre escritores y aficionados a la obra de Bob Dylan de que el premio es bien merecido y han aplaudido tal decisión de la Academia, al hacer justicia a la creación literaria del autor estadounidense, quien sería tal vez más admirado en los inicios de su carrera, en la década de 1960, cuando incluso la lírica de sus canciones, más identificada como poesía, figuró en textos literarios y hubo un libro que llevó el título de una de sus más celebradas composiciones como es Blowing in the wind (Flotando en el viento).
También han sido incluidos como poemas de carácter los títulos siguientes: Dama de los ojos tristes, Hace mucho tiempo, muy lejos, La huida del vagabundo, Tren viajero, Soy un vagabundo solitario, Una fuerte lluvia va a caer y otros.
La poesía en inglés tiene distintos valores a la del idioma español, es decir que ese lenguaje en cierta forma tiene diferentes códigos y para el lector del idioma español, que se deleita con la poesía trascendental de Neruda, para mencionar al más leído, resulta a veces un sistema intrincado el texto de la poesía en inglés, que gracias a la capacidad de traductores profesionales se logra un producto inteligible.
Sus letras
Se distinguió Bob Dylan por el mensaje en sus poemas, identificado con preocupaciones sociales y entre sus actos de solidaridad con la justicia estuvo su oposición a la guerra de Vietnam.
Sus poemas vibran también en la atmósfera del amor que en las melodías del pentagrama se dimensionan hacia alcances cósmicos para comulgar con todo lo que es humano.