En México, los fanáticos del intérprete de Yonaguni esperaron por horas e intentaron conseguir boletos para estos conciertos por todos los medios posibles.
Sin embargo, a pesar de sus esfuerzos, muchos de ellos no lograron conseguir entradas para ver a Bad Bunny en vivo a finales de este año.
Por medio de redes sociales, se hizo viral el caso de una mujer que hizo huelga afuera de la Arena Monterrey para exigir la venta de un boleto para su hijo, quien padece diabetes.
La mujer se subió en los barrotes y se aferró a ellos mientras manifestaba su inconformidad con la manera en la que se había manejado la venta de entradas para el concierto de Bad Bunny en Monterrey.
Mientras se mantenía aferrada a la estructura metálica, la mujer también pidió a los elementos de seguridad que la dejaran ingresar para comprar una entrada y cumplir el sueño de su pequeño hijo.
De igual manera, la mujer reclamó la supuesta complicidad de los policías con los revendedores, quienes no hicieron nada para frenar esta situación y los protegieron en todo momento.
“No me voy a bajar. Ni regalado te lo estoy pidiendo, lo voy a pagar. Nada más que me dejen pasar”, dijo la protagonista del video mientras era cuestionada por algunos medios de comunicación.
De acuerdo con el medio Telediario, la mujer hizo fila afuera de la Arena Monterrey por varias horas para conseguir un boleto para su hijo enfermo, aunque lamentablemente no logró conseguirlo.
▶ “No me voy a bajar”.
La fiebre por Bad Bunny ha sido llevada a otros límites: Una mujer hizo huelga afuera de la Arena Monterrey con tal de conseguir un boleto para su hijo.
¿Tú conseguiste boleto? https://t.co/3ppl43yMfu
🎥 Alberto Santos pic.twitter.com/X86YvJ4jaG
— @telediariomty (@telediariomty) February 10, 2022
El anuncio de la gira World ‘s Hottest Tour ha causado furor en Monterrey, donde varias personas acamparon por más de 50 horas afuera de la Arena Monterrey para obtener boletos para ver la presentación en vivo de Bad Bunny.
La larga espera afuera del recinto trajo consigo momentos icónicos que fueron inmortalizados en internet, como la parrillada organizada en plena calle por un grupo de jóvenes que acampaban para comprar boletos para el concierto.
Otro momento curioso fue protagonizado por dos jóvenes, quienes luego de hacer fila por más de 48 horas confesaron no tener dinero suficiente para comprar los boletos.
Ambos fanáticos de Bad Bunny tenían la esperanza que alguien se conmoviera por su situación y los ayudara a comprar las entradas para presenciar en vivo a su artista favorito.