Vida

El Juego del Calamar: seguidores envían dinero a la cuenta bancaria que aparece en la serie

El Juego del Calamar es una serie surcoreana de Netflix que ha causado furor en el mundo. En los capítulos aparece un número de cuenta bancaria a la que seguidores han enviado dinero.

Seong Gi-hun, el jugador 456 de la serie de Netflix El Juego del Calamar, revisa su cuenta bancaria luego de haber sobrevivido a los retos. (Foto Prensa Libre: Netflix)

Seong Gi-hun, el jugador 456 de la serie de Netflix El Juego del Calamar, revisa su cuenta bancaria luego de haber sobrevivido a los retos. (Foto Prensa Libre: Netflix)

La serie surcoreana de Netflix, El Juego del Calamar, continúa causando furor en el mundo y cada día se conocen noticias de la producción y de cómo ha repercutido en la vida de quienes la han visto.

El creador de la serie, Hwang Dong-hyuk, comentó en una entrevista reciente detalles sobre la cuenta bancaria que aparece en algunos capítulos y que pertenece al protagonista, el participante 456.

Durante los capítulos, se observa cuando Seong Gi-hun (456) utiliza cajeros electrónicos en los que aparece la cuenta bancaria, en la que le depositan los millones de wones surcoreanos que ganó al haber sobrevivido a los juegos.

El cineasta añadió que con la producción se acordó que se utilizaría el número de cuenta bancaria de uno de los integrantes, aunque no sospechaban que causaría el efecto que tuvo.

Luego del furor que causó la serie, notaron que personas enviaban transferencias monetarias, aunque los montos no eran grandes.

Según detalló, son transferencias de unos 456 wones, equivalentes a 38 centavos de dólar estadounidense. Sin embargo, para evitar problemas, decidieron cerrar la cuenta.

Anteriormente, se conoció que los seguidores de la serie habían tomado otro de los números que aparecen en los capítulos: un número de teléfono al que los participantes deben llamar.

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Ese número también existe, pero no corresponde a nadie de la producción.

El propietario del teléfono es una persona particular que ya está aburrida de recibir tantas llamadas telefónicas diariamente.