Un estudio a largo plazo realizado por investigadores de la Universidad Friedrich Schiller de Jena y de la Universidad de Alberta en Canadá llega a la conclusión de que sí es posible predecir si una relación durará un corto tiempo, o será duradera.
DEUTSCHE WELLE
¿Quiere saber cuánto durará su relación amorosa?
Según un nuevo estudio, se puede predecir si una relación dura poco, o mucho tiempo. Pero, de verdad, ¿quiere saberlo? Aquí se lo contamos.
Durante un período de siete años, se entrevistó regularmente a casi 2.000 parejas, y el 16 % se separó a lo largo del tiempo. En las entrevistas, se hicieron preguntas específicas sobre las variables. Por ejemplo: la satisfacción de la relación, el número de conflictos, el deseo de una relación a largo plazo y la necesidad de cercanía o independencia. “Descubrimos que las parejas que se separan se sienten más insatisfechas desde el principio y tienen más conflictos. Estos conflictos se multiplican con el tiempo. El deseo de una relación a largo plazo disminuye”, dice Christine Finn del Instituto de Psicología de la Universidad Friedrich Schiller de Jena.
Modelos de relaciones
El desarrollo de una relación puede describirse psicológicamente con diferentes modelos.
Teoría 1: todas las parejas experimentan una fase de luna de miel al principio de la relación en la que están igualmente satisfechos.
Una separación puede entonces remontarse a los problemas que surgieron durante la relación. Por su parte, las parejas que permanecen juntas han logrado establecer la satisfacción a largo plazo de la fase de luna de miel.
Teoría 2: las dos partes comienzan con diferentes niveles de felicidad desde el principio. La situación de partida desigual aumenta el riesgo de fracaso, porque la insatisfacción sigue creciendo.
Para el terapeuta de pareja y entrenador de soltera/os, Eric Hegmann, los primeros meses juntos muestran una tendencia del curso de la relación. “Ciertamente hay parejas que empiezan con peores condiciones que otras, donde las diferencias son mucho mayores que el afecto del otro. Pero la mayoría de ellos descubren esto en los primeros seis meses de la fase de encaprichamiento y luego simplemente no deciden continuar la fase de conocerse a profundidad en una relación”.
Acumulando angustia
En el curso del estudio, los investigadores descubrieron que es más probable que el desarrollo de la relación de las parejas que se han separado se describa mediante un híbrido de los dos modelos comunes.
“Hemos llamado el modelo ‘Acumulando angustia'”, dice Finn. Esto significa que si una pareja ya está discutiendo con frecuencia al principio, es de concluir que la relación no durará mucho tiempo. ¿Por qué no mejorará?. En el transcurso de la relación, los conflictos se hacen más frecuentes, las personas se distancian emocionalmente de su pareja y finalmente la separación es el último recurso.
¿El amor como un cálculo de costo-beneficio?
Ahora surge una pregunta más profunda: ¿habría salvado a mi novia de la angustia de saber si la relación durará mucho tiempo? ¿O saber que una relación no durará mucho tiempo destruirá las potenciales relaciones?
“Es comprensible el deseo de saber desde el principio si la inversión en la relación y la pareja valdrá la pena”, dice el terapeuta de parejas Hegmann. Sin embargo, a su juicio, no es propicio ver el amor como una especie de cálculo de costo-beneficio. Eso significaría que uno solo querrá salir con alguien si la relación va a durar mucho tiempo, y no le daríamos a una relación a corto plazo la oportunidad de construirse en base a las experiencias personales.
Christine Finn critica: “Una relación no es una pérdida de tiempo, solo porque no era perfecta al principio, y hay que lidiar con problemas y conflictos”.
Las parejas de Internet confían más en el otro
Según Finn, el éxito ininterrumpido de las plataformas online de las agencias de citas demuestra que la necesidad de tener una relación es más fuerte que nunca. A pesar de los algoritmos finamente calibrados, que se supone que muestran a la supuesta pareja perfecta, se dice que los portales de citas antes mencionados son todavía superficiales.
En el caso de Tinder, por ejemplo, el usuario decide en promedio, en unos pocos segundos, sobre la base de una imagen, si quiere “emparejar” a la persona pasando el dedo sobre la pantalla hacia la derecha o no volver a verla nunca más pasándolo hacia la izquierda.
Sin embargo, incluso las parejas que se conectan por Internet pueden crear un vínculo emocional estrecho. Según un estudio de Parship de 2016, el 96 % de las parejas en línea están dispuestas a confiar en sus sentimientos más íntimos, en comparación con el 76 por ciento de las demás parejas. Además, solo el 2 % de las parejas en línea dijeron que pelean regularmente con su pareja, mientras que el 27 % de las parejas fuera de línea se pelean regularmente.
Aprender de los conflictos
Según la terapeuta de parejas Hegmann, muchas parejas renuncian al potencial de aprender de los conflictos y crecer juntos. “Con apoyo profesional, muchas relaciones podrían salvarse. Sería ciertamente asombroso para muchos experimentar lo bien que las parejas llevan una relación feliz incluso con grandes diferencias”.
Sin embargo, hay una situación en la que incluso la terapia de pareja ya no puede ayudar. “En mi opinión, las parejas que no se pueden salvar son aquellas en las que uno de los miembros de la pareja ya ha terminado la relación y ya no está disponible”, dice Hegmann.
La cercanía y la libertad son lo más importante
Además de averiguar qué parejas se separarán, el estudio a largo plazo también mostró qué parejas tienen más posibilidades de tener una relación larga y feliz más allá de la etapa de luna de miel. Esas son las parejas que comparten el deseo de cercanía emocional, pero también la necesidad de desarrollo individual. “Aunque no captamos específicamente el aspecto de la comunicación, los resultados siguen mostrando que es muy importante comunicar claramente las propias necesidades a la pareja para trabajar juntos en la relación”, dice Finn.
Así que el consejo a un amiga/o que se sufra por la rotura de otra relación muy corta será que vea la relación fallida como una lección, en vez de una pérdida de tiempo, y la próxima vez que busque a alguien que necesite tanta cercanía y atención como él/ella.