DEUTSCHE WELLE

Luchar contra el coronavirus con aplicaciones espía y de ubicación

En algunos países estarían a favor de rastrear celulares para combatir el coronavirus. En Alemania, muchos critican que esta medida interferiría en el derecho fundamental a la autodeterminación informativa.

Todas las medidas de procesamiento de datos deben ser necesarias, adecuadas y proporcionales. Hasta ahora, no hay evidencia de que los datos de ubicación individuales de los proveedores de teléfonos móviles puedan ayudar a determinar las personas de contacto”. Con este tuit, el comisario de protección de datos de Alemania, Ulrich Kelber, comentó el domingo (22.03.2020) los cambios en la Ley de Protección contra Infecciones, propuestos por el ministro de Salud, Jens Spahn. La “Ley de Protección contra Infecciones” suena inofensiva, pero los cambios contienen elementos explosivos.

Seguimiento móvil

Toda crisis es un catalizador. Los responsables de la toma de decisiones deben reaccionar con rapidez en tiempos de crisis, como la del coronavirus. A principios de marzo, el Instituto alemán Robert Koch ya estaba debatiendo sobre la posibilidad de crear perfiles de movimiento de personas infectadas por el coronavirus mediante el rastreo de celulares. Esta medida no solo proporcionaría información sobre la propagación del virus, sino también detectaría y advertiría sobre posibles personas de contacto y, por lo tanto, contribuiría a contener la propagación del virus. En Asia, especialmente en China, las autoridades sanitarias han estado utilizando esta medida durante algún tiempo.

La semana pasada, la empresa de telecomunicaciones Deutsche Telekom remitió, por primera vez, cinco gigabytes de datos telefónicos a los investigadores del Instituto Robert Koch. Los investigadores también están negociando la entrega de datos con el operador móvil Telefónica. De acuerdo a la normativa de protección de datos vigente, los datos de seguimiento o rastreo solo pueden remitirse al Instituto Robert Koch de forma voluntaria, anónima y con fines no comerciales. Sin embargo, el juez de Berlín, Ulf Buermeyer, duda de si los datos grupales voluntarios y anónimos pueden usarse para la lucha contra el virus.

Perfiles de movimiento y aplicaciones espía

A la protección de datos no se le da tanta importancia en todas partes como en Alemania. El Servicio Nacional de Salud Británico (NHS) también está planteándose llevar a cabo una evaluación central de los datos de los celulares. En Austria, el operador móvil más grande del país, A1, se vio obligado a poner a disposición los datos de sus más de cinco millones de usuarios. Sin embargo, no son posibles los perfiles de movimiento para usuarios individuales, sino solo para grupos más grandes. Y los gigantes de Internet, Google y Facebook, estarían negociando con el Gobierno de Estados Unidos sobre poner a su disposición los datos de los usuarios.

Israel fue aún más lejos: el pequeño Estado decidió la semana pasada que quería encargar a su servicio secreto nacional, Shin Bet, que utilizara el rastreo de celulares de personas infectadas. Los argumentos a favor serían que los recursos y la experiencia necesarios están ya disponibles. Aunque el tribunal superior israelí frenó inicialmente esta medida, podría entrar en vigor si se declarase un toque de queda o establecieran controles parlamentarios especiales para el seguimiento del coronavirus.

La compañía israelí de seguridad cibernética NSO-Group, según informes de la prensa estadounidense, desarrolló una aplicación que supuestamente usa datos de celulares para rastrear la propagación del coronavirus y puede advertir a los usuarios individualmente. Dicha compañía, conocida por la creación de aplicaciones espías que usan las brechas de seguridad de WhatsApp, habría ofrecido su aplicación para rastrear el coronavirus a autoridades sanitarias en varios países.

Política de salud y vigilancia masiva

La pandemia del coronavirus ya tiene proporciones históricas. También es la primera enfermedad global contra la que también se lucha digitalmente. Si bien la función de las herramientas digitales, como la telemedicina y los portales en línea, es innegable, el seguimiento de teléfonos móviles origina debates sobre la vigilancia masiva digital.

Mientras en Israel, el servicio secreto y la vigilancia se perciben principalmente como protección y no ven por qué no se puede usar el rastreo de celulares para combatir el coronavirus, en Alemania, por el contrario, no se rastrearán los móviles como herramienta contra la pandemia. Por el momento.