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Cómo saber si un gato tiene fiebre en cuatro pasos
Si su gato presenta cambios en su comportamiento, jadeos o falta de apetito, quizá sea momento para tomar la temperatura de su mascota.
Debe tomarse la temperatura con sumo cuidado para evitar lesionar al gato. (Foto Prensa Libre: Freepik)
El gato es un animal especialmente sensible. Por ello, si tiene fiebre, usted notará rápidamente un cambio en su conducta y otros síntomas inusuales.
De acuerdo con el médico veterinario, Rodrigo Herrera, la causa más común de la fiebre en gatos se debe a infecciones bacterianas, ya sea por peleas con otros felinos, heridas infectadas, cirugías mal cuidadas y otras causas.
Si un gato tiene fiebre, no debe tomar esto a la ligera, ya que un aumento en la temperatura felina nunca es normal.
En este caso, es importante acudir lo más rápido posible al médico veterinario de confianza para que administre el tratamiento adecuado.
¿Cómo saber si un gato tiene fiebre?
En primer lugar, debe mantenerse alerta a los síntomas. Según Herrera y el médico veterinario, Víctor Girón, estos son algunos de ellos:
- Jadeos, los cuales pueden ser indicador de fiebre o problemas respiratorios
- Cambios en la conducta. Pueden buscar refugio en lugares oscuros, mostrar apatía, falta de energía y decaimiento.
- Falta de apetito. El gato podría dejar de comer.
- Según Girón, la pancita puede estar caliente, al igual que las orejas y las almohadillas plantares. El especialista también menciona que el gato puede tener ojos vidriosos.
- Nariz seca. No es un indicio directo, sin embargo, si nota que su gato tiene la nariz reseca, podría tratarse de fiebre si se acompaña de otros síntomas.
De acuerdo con el portal especializado Experto Animal, otros síntomas que presenta un gato con fiebre son: falta de higiene, comportamiento inquieto o angustioso y disminución en la ingesta de agua. En casos más graves, puede presentar escalofríos, temblores o respiración acelerada, indican los especialistas.
Para tomar la temperatura y confirmar si tiene fiebre, estos son los pasos que debe seguir:
Paso 1. Consiga el termómetro adecuado
De acuerdo con los expertos, es importante usar un termómetro especial para gatos. Herrera menciona que uno con características flexibles es la mejor opción para la toma de temperatura. Si no consigue uno, es preferible que el veterinario tome la temperatura.
Paso 2. Limpie y desinfecte el termómetro
Utilice alcohol para desinfectar su termómetro. Después, lubrique la punta con vaselina de bebé u otro lubricante recomendado por su veterinario. De acuerdo con Girón, es preferible usar lubricante especial para este propósito.
Siempre es importante leer el instructivo que acompaña este objeto para evitar utilizar cualquier producto que no sea el apropiado.
Paso 3. Introduzca el termómetro vía rectal
Aunque es incómodo para el gato, la única manera fiable de tomar la temperatura es introduciendo el termómetro vía anal. Para ello, debe levantar la cola de la mascota e introducir la punta del termómetro. Recuerde tener sumo cuidado para ello.
Según Experto Animal, al introducir este dispositivo debe cerciorarse de no hacerlo de forma “recta”, sino ladeando un poco el termómetro para que sea confiable el resultado. Sin embargo, Girón aconseja tener cuidado con ello, ya que el ángulo debe ser correcto para evitar lesiones.
Además, también se debe tener precaución porque algunas áreas rectales en gatos son pequeñas.
Paso 4. Espere unos segundos para verificar la temperatura
Bastará alrededor algunos segundos para que el termómetro muestre la temperatura. Cuando el aparato se detenga, remuévalo y verifique el resultado. Varios expertos recomiendan limpiar el termómetro posteriormente y premiar a la mascota por haber cooperado.
Si su gato tiene fiebre, llame inmediatamente a un médico. Si tiene alguna duda adicional sobre cómo hacer este procedimiento, compartimos un vídeo explicativo para que pueda usarlo como guía. Por otro lado, si no le es posible tomar la temperatura a su gato, le recomendamos visitar al veterinario para que el experto se encargue de este proceso.
¿Cuál es la temperatura común en un gato?
Según Herrera, la temperatura normal oscila entre 38.5 y 39.5 grados. Si la temperatura se encuentra en el límite, es importante estar alerta, pues podría ser indicador de alguna afección.
¿Cuándo acudir con un veterinario?
Si ya tomó la temperatura y esta se encuentra en un rango anormal, consulte de inmediato a un médico veterinario. Por otro lado, es importante realizar los chequeos anuales para prevenir enfermedades, según Herrera: “Siempre se recomienda llevar un chequeo anual cuando un gato es joven y si es mayor, dos veces al año”, menciona.
Recomendaciones
Para la toma de temperatura, una recomendación puntual es evitar usar termómetro de mercurio, menciona Girón.
En cuanto a la prevención de enfermedades, acuda al veterinario cuando corresponda para prevenir enfermedades. Herrera hace especial énfasis en la prevención de enfermedades como la leucemia (evitable con vacunación) y el sida felino, el cual puede prevenirse por medio de la castración.
También es importante llevar las vacunas en orden y que usted se mantenga informado respecto a los cuidados que un gato requiere. Asimismo, debe conocer los mitos erróneos respecto a la tenencia de los gatos, ya que existe la creencia que estos transmiten toxoplasmosis a humanos, cuando en realidad la vía de contagio son alimentos contaminados como la lechuga y las fresas, según Herrera.
Finalmente, recuerde que prevenir cualquier enfermedad es la clave para que su gato se mantenga sano y feliz. Por ello, tome en cuenta que esta información es orientativa y ante cualquier síntoma anormal que presente su mascota, llame de inmediato a su médico veterinario de confianza.