El sistema de lanzamiento más potente jamás construido, el cual es vital para los planes de la NASA de enviar nuevamente astronautas a la Luna y para las esperanzas del director ejecutivo de SpaceX, Elon Musk, de algún día colonizar Marte, despegó de Starbase en Boca Chica, Texas, a las 7.50 horas locales (12.50 GMT).
Tres intentos anteriores terminaron mal para el cohete, que se incendió en vuelo, pero la compañía sostiene que se trató de un costo aceptable en el marco de su enfoque de desarrollo rápido, de ensayo y error.
“La carga útil para estas pruebas de vuelo son datos. Basándonos en lo que logramos durante la tercera prueba de vuelo de Starship, nuestro objetivo principal hoy es superar el calor extremo del regreso” a Tierra, publicó SpaceX en X.
La trayectoria de vuelo será similar a la de la tercera prueba, que se realizó en marzo y en la cual Starship voló durante 49 minutos antes de incendiarse al volver a entrar en la atmósfera, sobre el Océano Índico.
Why is Starship made of stainless steel? This article from 5 years ago explains the reasons.
— Elon Musk (@elonmusk) June 6, 2024
Worth noting that the ship would have failed on reentry if made of aluminum or carbon fiber, as they can’t take the heat.https://t.co/QVAtv74quq
Desde entonces, SpaceX dice que ha realizado varias actualizaciones de software y hardware y espera lograr un aterrizaje suave para la etapa de propulsión en el Golfo de México y una “entrada controlada” para la etapa superior.
Meta: la Luna
Diseñado para eventualmente ser completamente reutilizable, Starship mide en total 121 metros de altura.
Su propulsor Super Heavy produce 16.7 millones de libras (74.3 meganewtons) de empuje, casi el doble que el segundo cohete más poderoso del mundo: el Sistema de Lanzamiento Espacial de la NASA, aunque este último ya está certificado, mientras que Starship aún está en desarrollo.
La estrategia de SpaceX de realizar pruebas en el mundo real en lugar de en laboratorios ha dado sus frutos en el pasado.
Flight 4 liftoff from Starbase pic.twitter.com/K32AdCND5O
— SpaceX (@SpaceX) June 6, 2024
Sus cohetes Falcon 9 se han convertido en caballos de batalla para la NASA y el sector comercial, su cápsula Dragon envía astronautas y carga a la Estación Espacial Internacional y su constelación de satélites de Internet Starlink cubre ahora decenas de países.
Pero el tiempo corre para que SpaceX esté listo para el regreso planeado de los astronautas a la luna por la NASA en 2026, utilizando una Starship modificada como vehículo de aterrizaje.
Para alcanzar esa meta, SpaceX necesitará primero colocar una Starship en órbita y luego repostarla con múltiples “Starship cisterna” para su posterior viaje, una compleja hazaña de ingeniería hasta ahora no lograda.
— Elon Musk (@elonmusk) June 6, 2024
Al menos un fan de SpaceX se ha cansado de esperar. El multimillonario japonés Yusaku Maezawa anunció esta semana que canceló un viaje planeado alrededor de la Luna en Starship con un equipo de artistas, porque no tiene idea de cuándo podría concretarse.